Tras pasar la noche sobre la vereda del Instituto de Viviendas, después de una larga jornada de protesta sobre avenida Sarmiento, un grupo de adjudicatarios del barrio Caraguatá continuó hoy con la manifestándose, en reclamo a la adjudicación de viviendas que no se concreta por parte del organismo provincial.

La manifestación por interrumpida luego de que la policía actuara bajo una orden de desalojo, que según indicaron los mismos vecinos damnificados, fue resuelta por la jueza de faltas Marcela Cortés.

La manifestación comenzó ayer a la mañana cuando un grupo de vecinos decidieron encadenarse, en incluso atarse a una rústica cruz, simbolizando la agonía que padecen por no contar con la casa propia, y tal como ellos mismos aseguran por tener hoy “sueños rotos, ilusiones robadas, familias sacrificadas por la ambición del IPDUV de negociar con inmobiliarias y sindicatos”, declaró Cecilia Rivero.

Cabe recordar que el reclamo de las familias al Instituto Provincial de Desarrollo Urbano y Viviendas (IPDUV) comenzó en 2015, poco después del sorteo de las viviendas de un barrio que debía construirse en el terreno del exparque Caraguatá.

Las adjudicaciones se hicieron en los últimos meses de la gestión de Jorge Capitanich como gobernador y que a partir de la asunción de Domingo Peppo no se reflotó por falta de fondos y sin disponibilidad de terrenos.

Según contó Rivero a este medio, “la medida de fuerza que comenzamos ayer subió la apuesta de la protesta porque descubrimos un negocio inmobiliario que atenta contra sus intereses”, sostuvo la vecina damnificada. Ayer la jornada se tornó más que complicada para los conductores que utilizan la avenida Sarmiento como acceso principal a la ciudad de Resistencia.

Durante la protesta, los manifestantes trataron de impedir el acceso del personal que trabaja allí aunque el objetivo no se cumplió porque en el organismo se habilitaron otras vías de ingreso.

Además, para darle mayor visibilidad al reclamo colocaron una estructura con forma de cruz a la que, de a uno, se ataron con sogas. Sin embargo, la protesta luego subió de tono al decidir los manifestantes realizar piquete sobre las dos manos de la avenida Sarmiento.

A la noche los manifestantes mantenían cortadas ambas manos de la avenida Sarmiento y advierten que no se moverán. Esta drástica medida se extendió por varias horas y provocó enorme caos vehicular sobre todo en el horario pico de la tarde, con cientos de autos ingresando hacia el centro y cientos circulando hacia la Nicolás Avellaneda, todos varados, y otros que prefirieron continuar la marcha sobre calles lindantes.

La falta de personal que organizara la circulación vehicular generó circunstancias de caos total, incluso con gritos entre los conductores.

Tras unas horas de corte absoluto, los manifestantes continuaron la protesta sobre la vereda del Viviendas, donde permanecieron toda la noche. Esta mañana, el capítulo volvió a encenderse con la protesta sobre la avenida Sarmiento. Sin embargo, cerca del mediodía, tras una orden judicial, personal policial comenzó el operativo de desalojo, el cual terminó con la detención de varias personas que se resistieron a bandonar la protesta.

Crédito: (Diario Norte)