El presidente no hizo menciones sobre Germán Garavano. Pero sí tuvo tiempo para acordarse de la polémica legisladora. ¿Fue un ensayo de acercamiento? Si así fue, la legisladora no sólo no se enteró. Ni siquiera se inmutó.

Mauricio Macri ya no sabe qué hacer para frenar el tsunami provocado por una desbocada Elisa Carrió.

En ese contexto, y durante un discurso del jefe de Estado en la presentación de Argentina Exporta en el Centro Cultural Kirchner, intentó un «acercamiento».

Durante sus palabras dijo que “hay que ayudarlos a crecer y creo que fortaleciendo la capacidad de exportar los va a ayudar muchísimo para crecer y crear oportunidades para todos. Esto es lo que pensamos en Cambiemos, no sólo es el Presidente, por eso la doctora Carrió ha viajado por el país y hoy nos acompañó”.

Sin embargo, Carrió, inmediatamente enfocada por las cámaras, sumida en su asiento de la platea, no solo ni se inmutó, sino que no tuvo ninguna reacción, y se encontraba en una pose similar a estar dormida.

Antes del discurso de Macri, Carrió apretó al mandatario al exigir sin miramientos que saque del Gobierno al ministro de Justicia, Germán Garavano.