La encargada del Área de Urgencias del Hospital Perrando, Rocío Soler detalló a NORTE una jornada «más tranquila que otros años», en cuánto a los accidentes automovilísticos y por pirotecnia. Sin embargo, destacó el gran número de jóvenes que sufrieron un coma alcohólico durante los festejos por la llegada del nuevo año.

«En lo que respecta a politraumatismos, el número no difiere a lo que es frecuente en un fin de semana cualquiera. De todos modos hay que esperar hasta al mediodía, cuando suele ingresar una nueva tanda de accidentados», dijo la profesional que ingresó a su turno a las 5.30.

Durante la noche del 31 y la madrugada del lunes 1 de enero solamente ingresaron siete (7) pacientes con heridas leves al Área de Urgencias.

«Es notoria la drástica caída en lo que respecta a accidentados con quemaduras por pirotecnia en comparación a otros años. Creo que no solo la situación económica del país sino también un cambio de conciencia hizo que el uso de pirotecnia, particularmente de estruendo, se haya reducido», apuntó la doctora Soler.