La libertad de prensa en Argentina sufrió un importante deterioro durante la gestión de Javier Milei, según el último informe anual de Reporteros sin Fronteras (RSF), destacando los ataques del presidente hacia el periodismo y el cierre de Télam como ejemplos. De esta forma, el país se desplomó en el ranking mundial que, según la última edición, advirtió sobre un incremento de las presiones políticas contra el periodismo a nivel global.
En el marco del Día de la Libertad de Prensa, la ONG que vela por el derecho a la información en el mundo indicó que según su clasificación sobre la libertad de prensa hubo dos países latinoamericanos que figuran entre los más afectados: Ecuador (que cayó 30 posiciones, hasta el puesto 110) y Argentina, que retrocedió 26 posiciones respecto a la última medición. «La hostilidad de Javier Milei a la prensa descalabra a Argentina del 40 al 66 en el ránking», indicó la ONG desde X.
Según el informe, el deterioro argentino respecto a la libertad de prensa coincidió con el cambio de gobierno. En esa línea, señaló que «la llegada del gobierno de Javier Milei, abiertamente hostil con la prensa, marca un nuevo y preocupante punto de inflexión para el derecho a la información en el país».
Alarma por los ataques a periodistas y el cierre de Télam
Entre los puntos a destacar figura el clima de tensión y censura que siguió a los ataques que realizó Milei ya como jefe de estado a numerosos periodistas, tratándose de una extensa lista compuesta por figuras como María O’Donnell, Jorge Lanata, Silvia Mercado, María Laura Santillán, Pablo Duggan o Jorge Fontevecchia, entre otros.
Milei, quien dijo en una oportunidad que los medios argentinos «son la peor cloaca del universo», fue duramente criticado. Según el informe, el mandatario «alienta las agresiones a periodistas y los ataques para desacreditar a medios y reporteros críticos con su política» y «sus partidarios lo difunden ampliamente». Este último punto también se vio con los cruces entre el vocero presidencial, Manuel Adorni, y periodistas acreditados en Casa Rosada.
En otro apartado el informe menciona como otro de los puntos críticos el cierre de la agencia estatal Télam durante el gobierno de Milei, considerado un «duro golpe» para el derecho a la información en Argentina.
El informe de RSF llegó en un momento crucial para el gobierno nacional, luego de que organizaciones locales e internacionales, como el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) con sede en Nueva York, expresaron su preocupación por la actitud del mandatario libertario. Entre otras cosas, le exigieron que «deje de estigmatizar a periodistas» y que les permita «hacer su trabajo sin restricciones», según un comunicado oficial.
Por su lado, el Foro de Periodismo Argentino (Fopea) había registrado en un informe por los primeros cien días del gobierno de Milei que cuatro de cada diez ataques a la prensa involucraban a Milei o a sus ministros. Mientras que la Academia Nacional de Periodismo este viernes 3 de mayo indicó que «los medios están siendo insultados y difamados».
La región
En América Latina, RSF destacó el deterioro de las condiciones para el ejercicio del periodismo en países como Perú, que atraviesa un deterioro de las condiciones de ejercicio del periodismo y quedó en el puesto 125. “El país ha perdido 48 posiciones en dos años”, resalta el comunicado.
Una situación similar ocurre con El Salvador, donde el presidente Nayib Bukele, que recientemente renoó su mandato, fue señalado por su actitud abiertamente hostil hacia el periodismo de investigación. Sin embargo, mejoró en términos relativos al haber pasado del puesto 133 al 115.
«Desde que accedió a la presidencia, en junio de 2019, el presidente Nayib Bukele, ataca y amenaza a los periodistas no afines a su gobierno. El ejercicio periodístico está marcado por el acoso a medios críticos y la criminalización de la cobertura sobre seguridad pública y pandillas. El uso de trolls refuerza la narrativa oficial y la información sobre asuntos públicos es confidencial desde la pandemia”, dice el informe.
A pesar de algunos avances en la región, como en Chile (52) y Brasil (82), donde se observa una mejora en la situación de la libertad de prensa, el panorama general sigue siendo preocupante. Como los peores clasificados continúan Cuba (168), Nicaragua (163) y Venezuela (156), países donde “el periodismo vive sometido a una censura que se apoya en decisiones arbitrarias”.
La directora editorial de RSF, Anne Bocandé, destacó la importancia de la voluntad política para garantizar mejores condiciones para los medios y el ejercicio del periodismo en la región. “La voluntad política puede permitir mejores garantías” para los medios, señaló.
En el otro extremo del continente, en Estados Unidos, un «baluarte» de la libertad de prensa a nivel global, la ONG sobre un aumento de la desconfianza hacia los medios y los ataques contra periodistas, lo que generó una creciente tensión en el país que cayó 10 posiciones en el ránking quedando en el puesto 55.
La explicación, en tanto, se da en un contexto de tensión por las elecciones presidenciales de noviembre. en el que probablemente se vuelvan a enfrentar Joe Biden y Donald Trump, dos rivales que emulan un contexto crítico como lo fue el asalto al Capitolio en 2021.
«Hay una creciente desconfianza hacia los medios, alimentada esencialmente por la abierta hostilidad de los líderes políticos, algunos de los cuales no dudan en llamar al encarcelamiento de periodistas”. “En varias ocasiones, las fuerzas de seguridad han registrado redacciones y detenido a periodistas de forma abusiva”, cerró el informe.
El mundo
Particularmente preocupante es la situación en Gaza, indicó la ONG en el reporte, donde la ausencia de voluntad política internacional para proteger a los periodistas «se vuelve evidente». Más de cien reporteros palestinos murieron en la Franja de Gaza asediada por Israel, con al menos 22 de ellos falleciendo mientras ejercían su labor.
Asimismo, RSF advirtió que en muchos casos, en lugar de proteger al periodismo, los estados contribuyen activamente a la desinformación. El informe señala un preocupante deterioro en el apoyo y respeto a la autonomía de los medios, especialmente en un año marcado por una cantidad sin precedentes de elecciones en todo el mundo, lo que augura una nueva ola de presiones sobre la prensa en países como India, Estados Unidos, México y Venezuela.
La caída en la clasificación de países como Afganistán, Togo y Burkina Faso refleja el grave deterioro de la situación para los periodistas en estas naciones. Por otro lado, Siria y Eritrea son descritos como zonas sin ley para los medios, con un alarmante número de periodistas detenidos, desaparecidos o secuestrados.
El estudio de RSF, en tanto, se basa en una combinación de datos cuantitativos sobre los abusos contra los periodistas y un análisis cualitativo, que incluye las opiniones de cientos de expertos en libertad de prensa.