En la noche del lunes, agentes de la Comisaría de Puerto Vilelas fueron alertados por una mujer de 34 años acerca de que su hijo de 11 años fue víctima de un intento de secuestro.
Según relató la denunciante, dos personas encapuchadas en un vehículo quisieron subir al pequeño a la fuerza y este salió corriendo del lugar, perdiendo de vista al rodado que lo esperaba de cerca y seguía. El niño salía de entrenar en el Club Deportivo Defensores de Vilelas.
En este marco, desde el club emitieron un comunicado y afirmaron que, luego del caso, los entrenamientos serán ahora a puertas cerradas.
«Informamos que debido a los hechos acontecidos en la tarde de ayer, hemos tomado la decisión de realizar los entrenamientos de las categorías inferiores a puertas cerradas», expresaron y agregaron que los padres «deberán ingresar a buscar a sus hijos dentro de la institución o bien permanecer como de costumbre en las tribunas hasta terminar la jornada».
Además, afirmaron que habrá «personal municipal y del club para un mejor control del ingreso y egreso al mismo, de 14 a 22hs» y que la dirigencia del club y los profesores están a disposición «para cualquier tipo de eventualidad».