El BCRA reportó un salto en la morosidad de préstamos personales y tarjetas, afectadas por la suba de tasas y el deterioro del ingreso real.
En empresas, la mora subió levemente al 1,2%, pero preocupa la suba de tasas. El freno en la actividad y la caída de ingresos dificultan el cumplimiento de cuotas.
Durante julio, el sistema financiero registró un nuevo salto en la morosidad de créditos otorgados a familias. El Banco Central (BCRA) informó que el índice de irregularidad alcanzó el 5,7%, máximo desde que la entidad inició la serie en enero de 2010. En junio, ese número se ubicaba en 5,1%.
La suba coincidió con un contexto de alta volatilidad en las tasas de interés, lo que frenó la demanda de préstamos y complicó el cumplimiento de compromisos financieros.
Préstamos personales y tarjetas, los más afectados
El informe del BCRA detalló que los préstamos personales mostraron un incremento en la mora desde el 6,5% al 7,3%, mientras que en tarjetas de crédito el salto fue del 4,9% al 5,3%.
En el caso de los prendarios, también se observó un deterioro, aunque más moderado, con un aumento del 3,7% al 3,9%. Los hipotecarios, en cambio, registraron una mejora, con una baja del 1% al 0,9%.

El segmento empresarial también muestra señales de alerta
Los créditos a empresas también reflejaron un aumento en la morosidad, aunque de menor magnitud. El ratio pasó del 1,1% al 1,2%, impulsado por caídas en prendarios y documentos comerciales.
Durante ese mismo período, la tasa nominal anual (TNA) para adelantos en cuenta corriente se triplicó, al pasar del 31% al 93%, según relevamientos del mercado.
Cambios en la política monetaria y presión sobre el peso
El giro en la política económica del Gobierno también jugó un papel relevante. La nueva estrategia busca controlar la cantidad de dinero en lugar de la tasa, lo que generó un salto fuerte en los retornos en pesos desde fines de julio.
Ese movimiento afectó tanto a las familias como a las empresas, que vieron encarecido el costo del financiamiento. En préstamos personales, la TNA ya rondaba el 70%, pero en septiembre superó el 85%, con un promedio actual cercano al 80%.
Morosidad general duplicó el mínimo de 2023
Al considerar tanto familias como empresas, la morosidad general en julio alcanzó el 3,2%, más del doble del mínimo del 1,5% registrado en octubre de 2023. En préstamos personales, el índice fue el más alto desde 2021, y en tarjetas de crédito, el mayor desde que hay registros.