Una escena de extrema violencia conmocionó a la localidad de Taco Pozo durante la madrugada de este domingo, cuando una mujer de 36 años llegó ensangrentada, en estado de shock y con un profundo corte en el cuello a la comisaría local, denunciando que había sido atacada brutalmente por su expareja.

El episodio ocurrió cerca de las 00:30, cuando la víctima logró llegar por sus propios medios hasta la dependencia policial. Allí, visiblemente afectada y con dificultades para hablar, relató que el agresor, un hombre de 41 años, de apellido Vizgarra, la habría tomado por la fuerza y atacado con un arma blanca, para luego escapar y dejarla herida.

Una herida en el cuello que pudo ser fatal

La mujer fue trasladada de urgencia al hospital local, donde los médicos constataron una lesión cortante en el cuello, una zona vital del cuerpo, que milagrosamente no resultó de gravedad, según el parte médico. No obstante, la cercanía del ataque a órganos vitales encendió todas las alarmas entre los investigadores.

El agresor seguía armado y merodeando la zona

Mientras la víctima era asistida, la fiscalía en turno tomó conocimiento de que el presunto agresor continuaba merodeando la zona del ataque, generando un clima de máxima tensión. Ante el riesgo de un nuevo episodio violento, la Policía montó un operativo urgente de vigilancia.

Minutos después, los efectivos lograron detener a Vizgarra, quien al momento de su aprehensión aún llevaba el arma blanca entre sus prendas, lo que incrementó la gravedad del caso y la preocupación por la seguridad de la víctima.

Detenido y tras las rejas

El agresor fue inmediatamente trasladado a la dependencia policial y quedó detenido a disposición de la Justicia, en una causa caratulada como “Lesiones con arma blanca”, mientras que la mujer fue puesta bajo resguardo ante el temor de nuevas represalias.

El violento episodio vuelve a poner en evidencia la escalada de hechos de violencia extrema y la urgencia de respuestas rápidas para evitar desenlaces fatales.