La exjefa de Estado se atribuyó la victoria cerca de las cuatro de la mañana, cuando los datos oficiales mostraban una diferencia de 0,01 por ciento y faltaba cargar el 5 por ciento del padrón.
Por su parte, el candidato Leopoldo Moreau había exhortado al ministro del Interior para que “libere los resultados”. Además, desde Unidad Ciudadana, denunciaron manipulación de la carga de los votos.
A las dos de la mañana del lunes el frente Unidad Ciudadana estaba a 0,29 por ciento de Cambiemos cuando todavía restaban 10 por ciento de las mesas por escrutar.
Desde el espacio encabezado por la expresidenta, aseguraban que las boletas restan contar llevarán a Cristina al frente del comicio. Luego, Moreau llamó tres veces al ministro del Interior, Rogelio Frigerio, que no le atendió el teléfono.
CFk se dirigió a los funcionarios y a la militancia presente en el estadio de Arsenal y aseguró: “Fue un show para el horario prime time de la televisión, como si fuera un timbreo”, dijo la ex presidenta sobre el festejo temprano de Cambiemos. Y se atribuyó la victoria en la provincia de Buenos Aires. Además, convocó «a construir una nueva mayoría para poner fin a tanto ajuste».
«Ese ajuste que lo quieren disfrazar con la palabra cambio o reforma. Y creo que ese es el gran compromiso. Vamos a pedirle al gobierno que escuche lo que las urnas han expresado: que cambie el rumbo económico. Que es necesario que escuche porque la realidad siempre termina aflorando.
«Queremos pedir que los que hasta hace un año y medio comían todos los días, puedan volver a hacerlo. Que los jubilados que recibían los medicamentos al 100% vuelvan a hacerlo. Y que por favor revisen esas tarifas que la gente no puede pagar. Eso no puede esperar hasta octubre.
«¿Ustedes se imaginan lo que habría pasado si esto sucedía cuando nosotros teníamos la responsabilidad de organizar, fiscalizar y garantizar una elección?», se preguntó Cristina de forma retórica.
«El maltrato que sufro de las más altas autoridades de la nación no me va a hacer torcer el camino. Quiero decirles que además hablaría muy mal de mí, que rasgos personalistas pudieran torcer el rumbo de lo que tenemos que hacer: representar los intereses de todos ellos y todas ellas», continuó la líder de Unidad Ciudadana.
Además, clamó: «Es necesario que el gobierno escuche. No que nos escuche a nosotros, que escuche la voz de la sociedad que se ha expresado en las urnas».