Ratificaron la medida de fuerza de mañana como respuesta a la represión que sufrió “el pueblo argentino que se manifestó para impedir el tratamiento de la reforma previsional”.
“Nunca avalaremos el ajuste brutal que pretende el gobierno nacional y que el Gobernador y los diputados provinciales lo avalan con el Pacto Fiscal aprobado en la Cámara de Diputados provincial en contra de todos los chaqueños en el día de ayer”, expresaron desde el sindicato.
El Secretario General de UPCP, José Niz, manifestó su enérgico rechazo al ajuste previsional impulsado por el gobierno nacional, y lo calificó de “robo los jubilados, los sectores vulnerables que reciben las asignación universal por hijo y los veteranos de Malvinas, quienes serán sometidos a una muerte lenta producto de los fondos que pretende ahorrar el gobierno nacional a costa de los sectores más desprotegidos”.
Señaló además que “el diálogo es uno de los pilares de la democracia pero este gobierno prefiere imponer y estafar, y destruir la república y el federalismo argentino”.
“Mañana ejecutaremos el paro general porque consideramos que si bien se levantó la sesión, esto no nos garantiza nada y es vergonzoso que los diputados nacionales elegidos por el pueblo de la Provincia del Chaco sean cómplices del gobierno nacional para rapiñar los derechos adquiridos por los jubilados y pensionados”, agregó.
Analizó los hechos de la jornada y remarcó “hoy en la Argentina vivimos la violencia institucional y el gobierno nacional defraudó a todos los argentinos, por eso tenemos que mantenernos en alerta porque nosotros vivimos la realidad mientras el gobierno de Macri vive una fantasía”.
Aseveró Niz: “No vamos a parar hasta que todos los proyectos de reforma se archiven y exigimos a los diputados nacionales que no legitimen con su voto, las recetas nacionales: reforma previsional, tributaria, laboral, educativa, ajuste, hambre, endeudamiento, despidos, reducción de los sueldos a los jubilados, reforma de ganancias en contra de los trabajadores, destrucción y aniquilamiento de los derechos adquiridos, desarticulación de los sindicatos y los convenios colectivos de trabajo, mayor presión hacia los sectores vulnerables transfiriendo los beneficios a las clases poderosas, empresariales y corporativas y pagar la deuda que contrajeron a cien años a costa de nuestro pueblo condenado a vivir sin futuro”.