La Asociación de Magistrados y Funcionarios del Chaco recuerda y reivindica este 8 de marzo “la presencia de las mujeres magistradas y funcionarias  judiciales en pos del reconocimiento de sus derechos de género y también los valiosos aportes a la comunidad jurídica y social desde los  distintos espacios en los que se ejercen funciones”.

“Desde 1853, año en que la nueva y actual Constitución nombró al primer juez, tuvieron que transcurrir algo más de 100 años hasta que una mujer fuera jueza: María Luisa Anastasi de Walger fue nombrada jueza en lo Civil en 1957. En julio de 2004 la Corte Suprema de Justicia de la Nación recibió entre sus miembros a dos mujeres: Carmen María Argibay y Elena Highton de Nolasco. E

El más alto ministerio judicial nunca antes había tenido dos mujeres en su seno. Una sola dama había llegado antes a la Corte, Margarita Argúas. Designada en 1970, estuvo allí hasta el 73”, afirmaron desde la Asociación.

Y sumaron: “Durante los 50 años posteriores, el camino estuvo marcado por la resistencia de algunos y la resiliencia de las mujeres. Si de igualdad de género se trata, podemos decir que nuestra provincia está a la vanguardia: El Superior Tribunal de Justicia, es el primero entre las justicias provinciales y la nacional, en integrarse con una mayoría de mujeres”.

“Si bien la violencia de género puede considerarse uno de los flagelos sociales de nuestros tiempos, las mujeres en función  judicial  debemos abordarla con determinación inclaudicable; desde otro ámbito no ha finalizado el camino para el reconocimiento de la igualdad  de oportunidades, desde el Estado”.