En la tarde de este sábado manifestantes de varias organizaciones participaron del escrache contra la vivienda de Gabino Manader, que actualmente goza el beneficio de la prisión domiciliaria pese a estar condenado por cometer delitos de lesa humanidad durante la última dictadura militar.
Además, Manader enfrenta un juicio que está concluyendo por varios delitos similares que sucedieron en lo que se conoció como la Brigada de Investigaciones.
Y la idea de los manifestantes, además de informar a los vecinos que en ese domicilio vive Manader, era demostrar que en Chaco como en otras provincias continuarán reclamado justicia más allá de que actualmente el gobierno nacional no tiene el mismo criterio.
También sirvió para movilizar a la sociedad ante la culminación del juicio por la causa Caballero II, donde Manader está imputado de cometer violaciones contra presas políticas.
Los manifestantes
“Solo aceptaremos una condena con prisión efectiva”, expresaron ayer los manifestantes que participaron de este acto.
“Fue uno de los represores más sádicos que trabajó en la Brigada de Investigaciones”, aseguraron mientras marcaban el domicilio que casualmente está ubicado cerca de la escuela de policía.
“Era experto a la hora de secuestrar y torturar”, manifestaron las cientos de personas que ayer resolvieron manifestarse también contra las decisiones de la Justicia.
“Torturaba hasta el borde la muerte”, agregaron desde la comisión organizadora de este acto.
“A una semana de cumplirse 42 años del inicio de la peor dictadura nos encontramos para nuevamente escrachar a un genocida, porque como lo dijimos hace tiempo: a donde vayan los iremos a buscar. Gabino Manader fue uno de los jefes de los grupos de tareas del Terrorismo de Estado en el Chaco”, resaltaron en un documento de la organización Hijos.
“Fue un actor destacado del accionar del terrorismo. Fue juzgado y condenado en 2010 a 25 años de prisión. Exigimos a los jueces del Tribunal Oral Federal de Resistencia que revoquen el beneficio de prisión domiciliaria. Porque tenemos la certeza que sus dolencias no son más que una maniobra en busca de impunidad, y lo demuestra el dictamen del cuerpo médico”, finalizó.
Fotografias: (Moira Salcedo)