Escenas de violaciones, prostitución, trata de personas, narcotráfico, torturas explícitas, enfermedades, mucha violencia y muertes.
Tengan a mano un whisky y manden hielo a sus venas porque El Marginal 2 – La Precuela viene, como dicen en el barrio y en la cárcel, muy picante. La serie carcelaria ganadora del Martín Fierro de Oro 2017 regresa este martes a la TV Pública (a las 22) con ocho episodios (cinco menos que la primera temporada) y con nuevos personajes que encabeza Esteban Lamothe, quien interpreta a Patricio, un médico que ingresa “injustamente” a la San Onofre.
Y se verá a una principiante Emma, la asistente social que personifica Martina Gusmán, y un “Diosito” muy distinto al que retrataron en la primera parte de la producción de Underground vista en todo el mundo a través de Netflix. —Esteban, ¿conociste a alguien que fuera condenado siendo inocente como tu personaje?
LAMOTHE: No. Como era un preso nuevo no pensé en términos carcelarios y junto con el personaje de Martina son los personajes más atados a la realidad que no estuvieron en la cárcel, son gente más normal entre comillas. Es un chabón que está en cana y que no sabe qué hacer, empieza a forjar lazos con los Borges y son su “peor es nada”. Tienen que sobrevivir y utilizará el conocimiento de la medicina que es algo que tiene negado. —¿Qué “Diosito” se verá esta temporada?
FURTADO: Es un personaje con menos experiencia que el que se vio en la primera parte. Es más inocente, ingenuo. No entiende muchas cosas, se las desayuna ahí. También la presencia femenina es muy fuerte, muy interesante, nueva, más el pabellón trans y la prostitución.
—En enero hicimos un backstage en la cárcel de Caseros y me encontré con que muchos extras estuvieron presos. ¿Charlaron con ellos? ¿Les contaron sus historias? F: Sí. Por suerte tener gente con esa vivencia al lado nuestro nos nutría y nos servía para poder entender, interpretar lo que les tocaba a nuestros personajes. Ellos tenían información que era natural tenerla y nosotros mamamos todo eso, y lo que nos contaban nos venía muy bien tanto de ex presos como de gente de la villa. —“Diosito” es un personaje central en “El Marginal”.
¿Cuando te vas a tu casa soñás o pensás las cosas que le pasan a tu personaje? F: En mi estado inconsciente no está “Diosito”. Cuando estoy en casa pienso en el personaje, qué haría, o cómo haría, y si soñé algo no me acuerdo. —La historia muestra a un inocente condenado. ¿La Justicia funciona en Argentina?
GUSMAN: La verdad es que es bastante polémica. Creo que no funciona, claramente que no. Es una obviedad.
L: Pregunta difícil. No tengo ni idea… Creo que es medio desastre, como la política en general. Nunca tuve a nadie cercano que tuviera problemas con la Justicia, y no sé cómo funciona. Sé que en este país es un tema de conflicto.
F: No tengo idea. Lo que puedo conocer me lo cuenta un diario o un informativo que no sé si me está diciendo la verdad, y por lo tanto, no sé si realmente funciona o no. —¿Les da tranquilidad que “El Marginal” esté en el canal público, que no depende del rating como los canales privados?
L: Me crié viendo ficción en ATC cuando era chico. Era lo mejor, estaban Hombres de ley. Imaginate que hoy tengo 41 años, y era el canal que más ficciones producía, y los actores que actuaban ahí eran muy buenos como Federico Luppi. Mi expectativa es que en la TV Pública haya una ficción que marque dos dígitos, que la gente vuelva, y que sea una plataforma de ficción importante para TV Pública que todavía no lo tiene. Estaría bueno.
G: Está buenísimo, porque la TV Pública tiene la posibilidad de llegar a todo el país, es un tercer canal fuerte de ficción, y está buenísimo. En Capital Federal somos muy citadinos, pero no es la representación de Argentina y está bueno para explotarlo más, con más producciones como El Marginal.
F: La TV Pública es una pantalla a la que todo el mundo tiene acceso en el país, y cada vez más, veo que se hacen cosas más interesantes de calidad. Hay que empezar a mirar un poco más este tipo de televisión pública, porque nosotros estamos ahí gracias al producto que estamos haciendo y no sé qué hubiese pasado en otro canal. Nosotros mostramos la posta, lo que sucede en una cárcel, y no sé si en otro canal podríamos. Entonces está bueno verlo. —También se verá en Netflix como la primera temporada, que tuvo repercusión mundial….
F: Sí. Que esté en diversas plataformas está buenísimo, porque eso nos lo dio un boca en boca muy positivo. Pero eso nace con la gente que vio la primera temporada en la TV Pública. Ahí empezó todo. —¿Cómo fue el vínculo con el público de otros países?
G: El Marginal se transmite en Canal Plus de Francia y la última vez que estuve en París me pararon para saludarme y felicitarme. Pensé que era por las películas que estuvieron en Cannes, pero era por El Marginal. Fue furor en Canal Plus. Se ve en Alemania, Estados Unidos, sin ventanas.
PROYECTOS Y DESOCUPACION. Martina Gusmán vuelve al cine el 30 de agosto con La quietud, que dirige su pareja Pablo Trapero. “Voy a ir a la presentación al Festival de Venecia y terminé de filmar El hijo, un thriller de Sebastián Schindel (El Patrón), con Joaquín Furriel y voy a filmar una película de Juan Pablo Martínez que se llama Lucía, un drama”, adelanta.
Esteban Lamothe lleva dos meses grabando Campanas en la noche, la próxima tira de Telefe y con la que estará comprometido hasta fines de diciembre. “Son ochenta episodios, sin aire por suerte; estoy contento porque es la primera vez que grabo una novela con este formato, no hay presiones, se puede ser más fiel a lo que está escrito y no cambiarlo porque un personaje funciona más que otro, que no la levanten porque hacemos siete puntos o que suframos excitación porque hacemos 20”, comenta el actor ganador del Martín Fierro por Las Estrellas que por primera vez interpretará a un villano.
“Soy malísimo, me encanta”, asegura. Furtado filmará en Argentina y Uruguay, pero prefiere no adelantar nada, y además, hay una obra en carpeta que podría protagonizar con Claudio Rissi, su hermano Borges en El Marginal, y con el deseo de que la dirija Adrián Caetano. —¿Cómo está la situación laboral de los actores?
L: Es difícil. Te digo la verdad: nunca tuve tanto trabajo como ahora, pero no es la realidad. Coincide con un momento que estoy de moda. Tengo muy buenos amigos que son grandes actores y no tienen trabajo. Está difícil. Películas comerciales con grandes lanzamiento son cuatro o cinco por año.
G: Argentina es un país que no tiene una industria fuerte de cine o televisión, y la verdad que somos un montón en el gremio. Los lugares son poquitos, chiquitos, y entonces la realidad depende del momento y de la moda. No tiene que ver con el talento, hay pocos espacios, y se va modificando. Y la inestabilidad económica también influye como en cualquier trabajo. Bienvenidos al pabellón.
ROLY SERRANO. Es “El Sapo” Quiroga, el capo de la San Onofre que manda hasta al propio director del penal Gerardo Antín interpretado por Gerardo Romano.
Maneja la distribución de la droga y la prostitución dentro de los pabellones. Torturador incluso delante de una visita de su pequeña hija. Padece una enfermedad terminal e intentará que el personaje de Lamothe lo salve. Borges y “Diosito”, los nuevos del penal, intentarán derrocarlo con la ayuda del director, ya cansado de él y sus manejos.
VERONICA LLINAS. La actriz será Rita, una asistente social corrupta que intenta mantener el statu quo y tendrá a cargo a Emma (Gusmán), la nueva e idealista asistente social.
LOREN ACUÑA. La actriz paraguaya, nominada a los Premios Cóndor por su destacada labor en el film Madraza, caracteriza a la proxeneta que lleva a las prostitutas al penal. “Soy ‘La Pichona’, maneja trata de personas, prostitutas, un personaje muy fuerte que es capaz de prostituir a su propia familia”, cuenta Acuña.
Confrontará con el personaje de Martina Gusmán. “Me van a gritar cosas malas en la calle”, se ríe.
RODRIGO NOYA. Un preso joven detenido por muchos delitos y que es uno de los fundadores del grupo la Sub 21 que está en la villa instalada en el patio de la San Onofre. “Cuando estuve en Fanny, la fan pregunté a la producción si había casting porque me encantaría estar y cuando hice el casting y quedé no lo podía creer, tenía muchas ganas de estar en El Marginal”, cuenta el actor de 24 años.
JOAQUINHA “LA JOAQUI” LERENA. Cantante de rap de 24 años revelación de Youtube que debuta en la actuación. Sebastián Ortega la vio en videos y la convocó para interpretar a la novia de “Diosito” y que retraten las visitas higiénicas con alto voltaje sexual.