Hay campañas en las redes pidiendo por salvar a la democracia. Se registraron denuncias de abusos a mujeres «por negras y comunistas». Además, hallaron un cadáver dentro de un auto, frente a la universidad de Río de Janeiro.
En un clima de altos niveles de violencia, democracia deteriorada, militarización de las calles y rebrote del fascismo, se llevará a cabo el balotaje por la presidencia de Brasil entre Jair Bolsonaro y Fernando Haddad.
La multiplicidad de sucesos en torno a las alborotadas horas eleccionarias se multiplican. Sorpresivamente, la «Justicia Electoral», ingresó junto a fuerzas militares a 17 universidades de nueve estados para decomisar panfletos «en defensa de la democracia», los cuales siquiera citaban a los candidatos.
Ocurrió en los estados de Rio, Paraíba, Pará, Minas Gerais, Ceará, Bahia, Rio Grande do Sul, Goiás e Mato Grosso do Sul.
En Rio, la jueza Maria Aparecida da Costa Bastos, mandó retirar una bandera que decía “UFF Antifascista” ubicada en el ingreso a la universidad, y además amenazó al director del establecimiento con que respondería judicialmente ante el caso de no cumplir con quitar la bandera.
En la Universidad Estadual de Paraíba, Campina Grande, fiscales y policía detuvieron a alumnos y profesosres, pidiendo documentación, datos sobre las actividades que realizan en las universidades y demás apremios antidemocráticos.
Desde la Justicia afirmaron que las intervenciones policiales y amedrentamientos contra la democracia fueron para «prohibir el uso del espacio público para hacer política partidaria», aunque ningún panfleto llevaba el nombre de ninguno de los candidatos.
Por otro lado, una joven estudiante de la universidad de Fortaleza fue abusada por ser negra y militante del Partido de los Trabajadores, y la llamaron como «puta comunista». En ese sentido, el establecimiento educativo publicó una carta de repudio.
En redes sociales, este viernes, comenzó a divulgarse el hashtag
#SaveBrazilianDemocracy con el objetivo de llamar la atención a nivel mundial acerca de la grave situación institucional en Brasil y el rebrote fascista.
Al tiempo, frente a la Universidad de Río de Janeiro, en la facultad de Derecho, mientras se estaba realizando un evento sobre el fascismo, apareció un auto con un cadáver dentro, del cual aún no se pudo identificar la identidad.
El cuerpo fue encontrado en el centro de Río, sobre la calle Moncorvo Filho, dentro de un auto.