El cuerpo del empresario Franco Macri fue trasladado esta mañana a la ciudad bonaerense de Pilar, donde serán sepultados durante la tarde de este domingo. Se espera que la inhumación comience alrededor de las 18 horas y que cuente con la presencia del presidente Mauricio Macri, quien interrumpió su descanso en la Patagonia para poder despedir a su padre.

Francesco Raul Macri (su nombre completo) había nacido en Roma, Italia, el 15 de abril de 1930. Ayer, a los 88, falleció en su casa, ubicada en la zona porteña de Barrio Parque.

En el último tiempo sufría una enfermedad, debido a la cual ya no distinguía a sus propios familiares. De hecho, su hijo, Mauricio, señaló hace poco: «Está acá y no está acá. Está hace más de un año postrado ahí».

El fallecido empresario emigró hacia la Argentina a sus 19 años, junto a su hermano Tonino, de catorce, y a su hermana más menor, María Pía. Aquí los aguardaba Giorgio, su padre, quien ya era accionista de SADOP (Sociedad Anónima de Dragado y Obras Portuarias) y fundador de la constructora Vimac, inaugurada en 1955.

En 1959, gracias a un préstamo de su padre, Franco pudo crear Demaco, una empresa constructora que se especializaba en la fabricación de casas baratas. Con el tiempo, llegó a erigirse como uno de los empresarios más poderosos del país.

Durante los años 1980, Franco Macri estuvo al frente de la firma Sevel, una de las más importantes de la industria automotriz argentina.

En su época de apogeo, esta empresa empleaba a 100 000 personas. Por esta firma recibió un Premio Konex en 1988.

Tuvo seis hijos: Mauricio, Sandra, Alejandra, Gianfranco, Mariano y Florencia.

En 2014 debió afrontar el dolor más fuerte de su vida: la muerte de Sandra, víctima de un cáncer.

Esta semana, el Presidente había viajado junto con su esposa Juliana Awada y a su hija menor Antonia a la ciudad de San Martín de los Andes, ubicada en la provincia de Neuquén, para pasar allí los feriados de carnaval, pero debido a la muerte de su padre suspendió sus planes para regresar a Buenos Aires.