Mauricio Macri está más cerca de poder nombrar al juez comercial que definirá el destino de Correo Argentino SA, un caso que involucra a su familia y que puede costarle a las compañías del grupo Macri miles de millones de pesos.
El Consejo de la Magistratura, el organismo que elige y controla a los jueces, ya cumplió con casi todos los plazos del concurso 408, convocado en 2018 para cubrir el cargo en cuestión: una vacante en la Sala B de la Cámara Comercial.
El trámite no estuvo exento de denuncias, la renuncia de un candidato y reclamos de la oposición por la supuesta manipulación de la conformación del jurado que debía evaluar a los candidatos.
Los concursantes rindieron exámenes, tuvieron sus entrevistas con los jurados, se analizaron sus antecedentes y ya hay una orden de mérito, de acuerdo a los documentos. Ahora, resta que una comisión elabore una terna y envíe tres nombres al Ejecutivo para que Macri decida quién ocupará ese cargo clave.
Luego, el Presidente debe enviar el pliego de su candidato al Senado y ver si pasa la prueba.
La Sala B debería estar integrada por tres magistrados pero actualmente sólo la componen dos: María Lilia Gómez Alonso de Díaz Cordero y Matilde Ballerini. Un tercer miembro será clave para definir un posible empate frente a las disidencias cada vez más notables entre las juezas.
Será clave cuando el Gobierno vuelva a cerrar un acuerdo con Correo para que la compañía pague su deuda con el Estado y defina el monto, los plazos y la tasa de interés. También será central en la investigación por presunto vaciamiento de Correo y los resultados de la pericia de los libros contables de las principales empresas de los Macri: Sideco y Socma. En noviembre, el entonces consejero Rodolfo Tailhade (FpV) pidió acceso al expediente del trámite y descubrió una supuesta irregularidad.
Cuando el Consejo sorteó a los jurados académicos, el azar arrojó a un profesor de la Universidad de Quilmes, pero en el expediente apareció una nota sin firma sosteniendo que no habían podido ubicarlo.
Se volvió a sortear. Pero cuando los colaboradores de Tailhade llamaron a la universidad, consiguieron dar con él en cuestión de escasos minutos.
Los consejeros Graciela Camaño (Peronismo Federal), Diego Molea (académicos), Alberto Lugones (jueces) y Eduardo “Wado” De Pedro (FpV) también reclamaron explicaciones en las últimas semanas. En diciembre, tras la denuncia de Tailhade, otra cuestión alteró los resultados: uno de los candidatos con más chances renunció al concurso.
El juez Gerardo Santicchia estaba quinto. El diario porteño Perfil, se comunicó con el magistrado, quien confirmó que ya no está en carrera por el cargo pero no especificó las razones de su salida.
Hay diez candidatos, ocho hombres y dos mujeres. El juez Javier Cosentino quedó en el primer puesto, y los también magistrados Sebastián Sánchez Cannavó y Fernando D’Alessandro en el segundo y tercer lugar respectivamente. El juez Diego Papa está cuarto y, tras la renuncia de Santicchia, el camarista civil Gastón Polo Olivera quedó quinto.