Cristina Kirchner participó de un acto con trabajadoras bancarias del sindicato que conduce Sergio Palazzo y criticó duramente las políticas del Gobierno.
«Los dos colectivos más agredidos por estas políticas son las mujeres y los jóvenes«, afirmó la candidata a vicepresidenta del Frente de Todos.
Agregó Cristina: «Y no hablo de las mujeres que tienen un trabajo registrado. Hablo de esas mujeres, miles, millones, que han perdido el trabajo registrado que tenían porque cerró la fábrica o porque cerró el comercio donde trabajaban. Hablo de las que tenían changas, limpiaban una casa, cuidaban chicos. Cuando los sectores medios pierden, se desprenden de esos servicios».
«Este es un modelo político social que se cobra en las mujeres y los jóvenes la tragedia de la falta de solidaridad y la explotación», cerró el tema la ex presidenta sobre el modelo de Mauricio Macri.
Además, reclamó: «Se puede ser muy capaz pero si no te importa un corno lo que le paso al otro u otra, ¿de qué sirve esa capacidad?».
Pidió la senadora: «Tiene que volver al Estado gente capaz y que se conmueva y que tenga sensibilidad. Queremos volver a tener una vida normal».
Sobre los medios de comunicación, aseveró: «Entre las tapas de los diarios y la Historia, me quedo siempre con la Historia. Además, se quejó de que desaparecen los billetes de 5 pesos.
«Los argentinos nos despedimos de la imagen de San Martín en los billetes. Tanta gente de este gobierno que admira a Estados Unidos. ¿Por qué no lo sacan a Washington o a Franklin de los billetes? Llegan a proponer eso allá y los mandan a Guantánamo».
Elogió la lucha feminista la senadora. «Esas cosas que se decían o hacían (contra las mujeres) no se van a hacer más a partir del surgimiento del movimiento de mujeres en Argentina».
Y cerró: “Quiero volver a tener una Argentina donde la gente vuelva ser feliz. Donde una familia disfrute un fin de semana, donde le puedan comprar un juguete a su hijo a fin de mes. Volver a tener una vida normal. Esto es lo que queremos. Y esto es lo que yo interpreto que quieren los argentinos. No estar muriendo de frío en la casa porque no se sabe cuánto va a venir de gas en la factura».