En otra férrea defensa al discurso xenófobo institucional del gobierno, el senador reconoció que Argentina está suscrita al convenio, pero consideró que el país «no debiera ser tan sensible ante este tipo de reclamos».
“¿Por qué no se lo dicen a Estados Unidos y a países importantes del mundo?”, desafió al organismo internacional.
En un nuevo esfuerzo por ratificar su perfil que soslaya la xenofobia , el candidato a vicepresidente de Juntos por el Cambio, Miguel Ángel Pichetto, llamó a “no cumplir” la declaración de la ONU en la que le recomendó al gobierno nacional derogar el decreto que facilita la expulsión de migrantes.
Además, denominó a los integrantes de las organizaciones sociales que acamparon sobre la 9 de julio como “gente que tiene que buscar trabajo” y criticó a la Iglesia católica por “estar siempre creyendo que hay hambre” en el país.
“Me parece que no hay que cumplir más allá de que se pertenezca a la comunidad de las naciones”, afirmó el senador nacional cuando se le preguntó por la declaración del Comité de Protección de los Derechos de los Trabajadores Migrantes de Naciones Unidas, que cuestionó el decreto 70/2017 que restringió el ingreso de ciudadanos extranjeros al país y facilita su expulsión.
Durante una entrevista por CNN Radio, Pichetto sostuvo que el país no debiera “ser tan sensible a ese tipo de reclamos” sino, por el contrario, “hacer valer la ley nacional”. “¿Por qué no se lo dicen a Estados Unidos y a países importantes del mundo?”, desafió.
De la misma manera volvió a cuestionar el caso de Vanessa Gómez Cuevas , a quien se le permitió el reingreso a la Argentina luego de haber cumplido una condena penal.
“Esta señora cumplió cuatro años de condena por venderle drogas a los pibes”, dijo y cuestionó a la ONU por defender los derechos de esa mujer. Es más, calificó irónicamente a los organismos internacionales como “armas tan bondadosas y sensibles”.
La emergencia alimentaria, otro blanco
Por otra parte, el compañero de fórmula de Mauricio Macri volvió a cuestionar la media sanción de la ley de emergencia alimentaria, a la que calificó como “un exceso que no resuelve el problema de fondo”.
Para él, “el problema” al que habría que darle una respuesta es “el crecimiento y la generación de empleo, porque esta gente (que acampó en la 9 de Julio) tiene que buscar trabajo”.
La Esma, candidata a Patrimonio de la Unesco | El Museo Sitio de Memoria busca este reconocimiento mundial
“Ahora descubren que hay hambruna en la Argentina como si se tratara de un país africano en guerra. Y me parece que no”, disparó el diputado, y lanzó una crítica directa a los obispos.
“La Iglesia (católica) siempre está creyendo que hay hambre”, dijo y redobló: «La iglesia que no manda ningún mensaje de tranquilidad y paz y hablan como comentaristas».
En este sentido, sostuvo que “el camino no es dar planes y seguir aumentando el gasto social de manera indefinida”, aunque admitió que “hay dificultades” que “deben debatirse pero no desde la óptica del desocupado, sino del trabajo”.