Desde las elecciones del 11 de agosto se retiraron de los bancos 9820 millones de dólares. Las reservas internacionales finalizaron en 49.968 millones de dólares. Se perdieron 117 millones en la jornada.
Los controles cambiarios continúan generando problemas para el funcionamiento del sistema financiero. El mercado de futuros Matba Rofex anunció este lunes que dejará de operar contratos a futuro y opciones de títulos públicos. Las operaciones con estos instrumentos se habían empezado a incrementar en las últimas semanas. La cobertura en futuros de bonos fue una estrategia para asegurar la ganancia de un rulo algo más sofisticado.
La brecha cambiaria se transformó a partir de la semana pasada en uno de los principales problemas del mercado interno. El dólar oficial cerró ayer en 58,78 pesos (con un avance de 34 centavos) y el mayorista finalizó en 56,28 (con alza de 17 centavos). Estos valores se ubican lejos de la cotización de referencia para las grandes operaciones financieras.
El dólar bolsa se posicionó este lunes en 66,60 pesos y el contado con liquidación en 70,57 pesos. La diferencia con el precio oficial es mayor al 25 por ciento.
Las reservas internacionales finalizaron en 49.968 millones de dólares y continúan en baja.
Se perdieron 117 millones en la jornada. Los depósitos en moneda extranjera de los bancos son el principal elemento para explicar la disminución de las reservas.
El Banco Central informó que el 11 de septiembre (última información disponible) la salida de depósitos fue de 185 millones de dólares.
Desde las elecciones del 11 de agosto se retiraron de los bancos 9820 millones de dólares. La cifra representa uno de cada tres dólares que había a comienzo de agosto en cajas de ahorro en moneda extranjera en el sistema financiero.
El riesgo país finalizó este lunes en 2223 unidades y marcó un avance de 51 puntos. Los bonos denominados en dólares no consiguen recuperar precios y ya se ubican cerca de los niveles más bajos alcanzados finales de agosto y los primeros días de septiembre.
Los títulos cortos como el Bonar 2020 se operaron con una baja de 2,9 por ciento. Los de mediano y largo plazo como el Discount 2033 perdieron el 1,3 por ciento. La Argentina no tiene financiamiento para encarar el repago de estos títulos y eso eleva el riesgo de la deuda soberana.