Este miércoles, el ministro de Defensa, Agustín Rossi, encabezó el acto de recepción del patrullero oceánico multipropósito ARA Bouchard en la Dársena Norte de Puerto Madero, el primero de los cuatro contactos de este tipo que fueron adquiridos por el Estado argentino a la empresa francesa Naval Group.
En este contexto, el ministro aseguró que pese a la crisis económica, se buscará avanzar con el reequipamiento de las Fuerzas Armadas. «Sabemos que tenemos que avanzar en el reequipamiento de las Fuerzas Armadas y lo que tenemos en la medida que lo permita el contexto económico. Tener una política de defensa hace la autoestima de un pueblo. Tenemos que tener militares que sean capaces de proteger nuestros recursos naturales y estratégicos «, señaló.
Al hablar en la cubierta de la nave ante una formación de efectivos de la Armada, el ministro aseguró que «la actualización de este buque es una gran noticia» para la fuerza y para «toda Argentina».
«Estos facilitan las tareas de patrullaje y fortalecen la autoestima de la Armada, que está potenciada para sentirse parte del proyecto de Nación», señaló Rossi.
La adquisición de estas cuatro naves tiene un costo de 300 millones de dólares y se cancelará al largo de 11 años, confirmaron fuentes de Defensa. La operación se realizó durante el gobierno de Mauricio Macri y Oscar Aguad como ministro de Defensa de la gestión de Cambiemos, quien asistió a la presentación de hoy.
Luego de zarpar el 15 de enero último desde la Base Naval de Toulon, al sur de Francia, al mando del capitán de Fragata Daniel Eduardo Giudici, el patrullero oceánico ARA “Bouchard” P-51, arribará con su dotación compuesta por 32 marinos a la Dársena Norte, y luego seguirá hasta el apostadero en la Base Naval Mar del Plata donde se incorporará a la División de Patrullado Marítimo.
El buque, bautizado originalmente L´Adroit, fue denominado ARA “Bouchard” en honor al marino francés y héroe naval, Capitán de Navío Hipólito Bouchard, el cual luchó al servicio de las Provincias Unidas del Río de la Plata y del Perú.
Estos patrulleros oceánicos son unidades de liviano porte, artilladas. Tienen una eslora de 87 metros, 13,6 metros de manga, 3,8 metros de calado y alcanza un desplazamiento de 1.650 toneladas. Están diseñados para una tripulación básica de 40 personas y tienen una capacidad adicional para embarcar 19 personas. Su autonomía es de 7.500 millas náuticas (13.890 km.) navegando a 12 nudos y puede alcanzar una velocidad máxima de 21 nudos (aproximadamente 38 km/h.).
La unidad contribuirá mediante la presencia naval con la vigilancia y control de los espacios marítimos, la protección y control de los recursos naturales renovables y no renovables; como así también con operaciones marítimas de búsqueda y rescate; de apoyo humanitario, entre otras.
Su incorporación tiene como objetivo mejorar la vigilancia y control marítimo en el área oceánica de interés, cuya extensión es de 1.159.063 km² en la Zona Económica Exclusiva de la República.