El Presidente encabezó el anuncio respecto a la nueva fase del aislamiento social obligatorio, que se extenderá entre el 18 de julio y el 2 de agosto próximos
Alberto Fernández, acompañado por el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y el gobernador de la Provincia de Buenos Aires, encabezó este viernes al mediodía el anuncio de una nueva etapa del aislamiento social obligatorio en el AMBA por la pandemia de coronavirus, que se extenderá entre el 18 de julio y el 2 de agosto próximos.
“Si hay alguien que quiere que la pandemia se termine soy yo. Pero la pandemia sigue presente, atacando, enfermando y llevándose vidas”, comenzó diciendo el Presidente, quien, no obstante, expresó: “Tenemos optimismo en alcanzar los logros propuestos”.
“Tenemos una cantidad de casos que no esperábamos tener. Pero creo que seguimos estando, en términos comparativos, en una situación buena. Hemos logrado que nadie se quede sin atención”, continuó.
Y agregó: «Hemos incrementado la capacidad de camas y la ocupación de terapia intensiva ha aumentado, pero también se nota que se ha ralentizado la velocidad de contagio y se ha hecho más lenta la ocupación de camas hospitalarias. El esfuerzo no ha sido inútil».
Sin embargo, advirtió: “Estamos muy lejos de pensar que la situación está superada. Necesitamos tener presente que el riesgo está todavía latente. Hay que extremar los cuidados.
Por último, antes de cederle la palabra a Horacio Rodríguez Larreta y Axel Kicillof, Fernández concluyó: «Entre el 18 de julio y el 2 de agosto vamos a ir tratando de volver a la vida habitual, en este nuevo mundo diferente que nos exige cuidados diferentes. Va a ser escalonadamente y lo van a decir los gobernadores. Pero si hay que volver atrás, volveremos atrás. Si hay que ajustar más, ajustaremos más”.