El presidente Alberto Fernández encabezó esta tarde un nuevo anuncio de cuarentena en la Quinta de Olivos junto al jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y el gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof.
El mandatario nacional presentó una etapa de dos semanas a partir del lunes hasta el 16 de agosto, con condiciones similares a las actuales en la zona metropolitana de Buenos Aires.
Al iniciar su discurso, Fernández aseguró: «El problema empezó a irradiar a otros lugares. Estamos viendo también que han empezado a manifestarse focos en otros lugares del interior del país. Entonces, tenemos que llamar la atención de lo que nos está pasando. Estamos enfrentando a un enemigo invisible y el mundo no ha encontrado las armas adecuadas para combatirlo.
«Cualquiera que se enferma, padece. El asintomático y el que tiene síntomas. Créanme que las experiencias que se escuchan… no es tan fácil, no es una gripe más», agregó.
En ese marco, el mandatario destacó que «la única solución que encontramos es cuidarnos nosotros. El virus no nos busca, nosotros vamos a buscarlo. Y es ese el mayor problema que hoy tenemos, la circulación nuestra.
Se ha convertido en el mayor enemigo para poder superar esta situación de pandemia, Porque nosotros sentimos que el problema se acota, y ahí nos relajamos y ahí es cuando nos exponemos al peor riesgo».
Y anunció: «Hasta el 16 de agosto vamos a mantener las cosas como están hoy, pero les digo. En los últimos días se nota que el virus está circulando más y se detectan una mayor cantidad de contagios. Y todo esto ocurre, consecuentemente genera internaciones y lamentablemente fallecimientos».
A pesar de mantener todo igual, el jefe de Estado señaló que en las últimas dos semanas «empezamos a normalizar los números y estamos descuidando que tras cada número hay una vida. Tiene nombre y apellido. Un rostro. Y por lo tanto quiero llamarlos a la reflexión, porque es mucho más que un número a los que los estoy convocando. No los convoco a corregir una estadística, sino a cuidar nuestra vidas y la de los otros. A no contagiarnos y no contagiar. Y los estoy convocando a que lo hagan con decisión propia.»
«Argentina sigue conteniendo la cantidad de contagios. Y eso es a juicio de todos a los que he consultado el resultado de que ha habido cierto relajamiento. Detesto decirles esto, porque querría que la Argentina funcione en plena normalidad. Pero esto es lo que nos está pasando y eso es producto de nuestra circulación», precisó Fernández.
Además, volvió a mencionar el concepto de responsabilidad social: «Esto depende de la unión social, de unir esfuerzos. En estos 15 días todos nos relajamos y sentimos que la cosa estaba contenida, pero no lo está, estamos muy lejos de eso».
En ese marco, dirigió un mensaje a los jóvenes que violan la cuarentena y «se creen inmunes»: «Quiero hablarles a los jóvenes de corazón. En juventud es muy importante el encuentro con los amigos, los afectos, yo extraño los recitales y el fútbol, extraño tocar la guitarra como nadie. Pero no podemos hacerlo, porque además los jóvenes piensan que son inmunes, y es verdad que son los que mejor sobrellevan la enfermedad, pero contagian, y con los adultos es impiadosa la enfermedad. Chicas, chicos, chiques, es una sonsera hacer fiestas escondidas, fiestas electrónicas, se exponen a un gran riesgo.
Todos extrañamos el encuentro con la familia y amigos, jugar el picadito, pero no podemos. Sometemos al otro a un riesgo enorme. Les pido por favor que nos ayuden y nos acompañen, los necesitamos hoy más que nunca». Por último, Fernández concluyó el anuncio al decir que «seguimos trabajando para ver si la ciencia nos alcanza el remedio para curar enfermos. Vamos a mantener el ATP y el IFE para los que los necesiten, nadie piense que el Estado los va a abandonar. Vamos a ser más frecuentes en estos encuentros con Axel y Horacio para monitorear.
En este ratito que duró la reunión se murieron cuatro argentinos y hubo 260 contagios. Ese es el coronavirus. Estarán prohibidos los encuentros sociales, quienes lo hagan pueden incurrir en una responsabilidad penal».