Con datos de Unicef Argentina y propios, la Organización Atravesados por el Femicidio informó que 21.800 mujeres sufrieron violencia física durante la pandemia.
El 80% de esas agresiones fueron perpetradas por las parejas de las víctimas. Apenas el 13% de estos hechos resultaron denunciados en comisarías o espacios institucionales.
Un estudio reveló que, desde el inicio de la pandemia del Covid-19 en la Argentina, 21.800 mujeres sufrieron algún tipo de violencia de género, al tiempo que especialistas confirmaron que «crecieron las consultas» por parte de las víctimas y sus familiares.
El dato surge de un estudio llevado a cabo por UNICEF Argentina, el cual abordó el «impacto del Covid-19 en las familias» en medio, además, del aislamiento social, preventivo y obligatorio decretado por el gobierno para poner freno a la pandemia, en la que ya hubo más de un millón de contagios en todo el país.
De esta manera, el informe, que dejó en evidencia el contexto de violencia, maltrato, abuso y explotación que viven las mujeres en medio de la pandemia, reveló que 21.800 mujeres declararon que sufrieron agresiones físicas, de los cuales el 80% de los casos fueron por parte de sus parejas.
Organización Atravesados por el Femicidio
«La pandemia es un caldo de cultivo porque le viene bien al violento el encierro, ya que su modus operandi es prohibirle (a la víctima) tomar contacto con toda la gente que la rodea. Es un trabajo menos que tiene que hacer el violento porque directamente, gracias al aislamiento que vivimos (debido a pandemia del coronavirus), ya la tiene encerrada en la casa», comenzó Marcela Morera, integrante de la organización Atravesados por el Femicidio.
Y esta afirmación se vio sostenida por los datos detallados por UNICEF, ya que, en el 2,4 por ciento de los hogares, las mujeres reportaron sentirse agredidas o maltratadas verbalmente. En este contexto, se informó de un dato no menor: sólo el 13% realizó la denuncia en sede policial y centros especializados.
Al respecto, Morera manifestó que, «en estos momentos, en el que el marido trabaja desde la casa, la mujer no tiene excusa para ir a denunciar». «A eso hay que sumarle que, cuando va a hacer la denuncia, no está media hora, sino que puede esperar hasta cuatro horas, entonces ¿cómo se la dibujas al violento? Es imposible porque cuando volvés te comés una paliza», añadió.
Por este motivo, lamentó que «crecieron la cantidad de consultas y el número de familiares que somos en el grupo», en tanto que confirmó que a su organización llegaron «nuevos casos que surgieron dentro de la pandemia».
«Los casos de violencia de género, en su gran mayoría, no llegan a juicio; llegan algunos sobre femicidios o intento de femicidios», sostuvo la integrante de Atravesados por el Femicidio, quien añadió: «La gente se encuentra como acorralada, sin saber qué hacer. No saben cómo salir y poder denunciar, algunos esperan a que pase la pandemia pero lo que surge acá es la preocupación de si no la matan antes (a la víctima)».
Por otro lado, con la confirmación del gobierno nacional de que la cuarentena durará, por lo pronto, hasta el 8 de noviembre -y a sabiendas de que es muy factible de que se vuelva a extender otra vez-, Morera reflexionó: «No veo un buen futuro, porque si esto sigue así y no hay una respuesta rápida del Estado, no vamos a poder hacer demasiado».
«Necesitamos respuestas mucho más rápidas y, por otro lado, si la mujer no puede salir a denunciar, es muy difícil ayudarla», agregó.
Se necesitan campañas de difusión
Y concluyó: «Hay que estar muy atentos y hacer más campañas de difusión para que estén atentos los que están alrededor, pero lamentablemente está la cultura del no te metas, en el que la gente cree que los problemas se arreglan en la cama y listo».
Cabe destacar que la problemática de la violencia de género mostró una de sus peores caras en el 2020. De hecho, en una edición anterior, este medio citó un informe realizado por el Observatorio de Femicidios en Argentina «Adriana Marisel Zambrano», en el que se detalló que se llevaron a cabo más de 150 femicidios.