Gracias a un cabezazo de Paulo Díaz en tiempo de descuento, el Millonario igualó 1-1 con el conjunto colombiano y es escolta de Fluminense en el Grupo D. A partir de ahora, ya piensa en el cruce con Boca del domingo.
A River le costó hacer pie en Barranquilla pero logró un empate 1-1 de manera agónica ante Junior por la fecha 4 de la Copa Libertadores. Gracias al cabezazo de Paulo Díaz en tiempo de descuento, el Millonario suma seis puntos en su Grupo D y es escolta de Fluminense. A partir de ahora, Marcelo Gallardo y compañía comienzan a apuntar los cañones al Superclásico frente a Boca del domingo próximo.
Desde el silbatazo inicial se vio a un conjunto colombiano mejor plantado en el campo, con la idea clara de lastimar a través de sus ataques vertiginosos y sus bombazos desde afuera del área. A los dos minutos de juego, Miguel Borja, una pesadilla para toda la defensa millonaria, avisó con un potente disparo que terminó en las manos de Franco Armani.
Antes del cuarto de hora, River respondió con un intento de Federico Girotti que se fue muy por encima del arco defendido por Sebastián Viera. En la acción posterior, otra vez Borja generó peligro y estuvo a centímetros del gol: se escabulló en el punto penal y pateó ante la salida del N°1 casildense pero no logró darle dirección de red.
Más allá de ese par de situaciones despilfarradas, la tercera fue la vencida para el atacante cafetero, que a los 20 quedó mano a mano con Armani tras un pase quirúrgico de Jhon Pajoy, definió entre sus piernas y dejó su apellido en el 1-0 de Junior.
Luego de su conquista, el encuentro debió ser interrumpido debido a los gases lacrimógenos que invadieron cada rincón del estadio y ahogaron a los protagonistas. Más allá de los disturbios y las marchas que se desataron en las calles aledañas (y en gran parte de una Colombia en tensión desde hace varios días), la pelota siguió rodando.
A los 33, nuevamente Borja se escapó por izquierda, se adentró en zona de peligro y apuntó al segundo poste, pero no pudo firmar su doblete. La última de la primera parte también fue del local, con un zurdazo de Fredy Hinestroza que se estrelló en los guantes de Armani ya en tiempo de descuento.
En la segunda mitad, el Muñeco intentó revertir la historia con los ingresos de Agustín Palavecino y Jorge Carrascal, primero, y de Matías Suárez y Rafael Santos Borré, un tiempo después. Desde ahí en más, Junior comenzó a retroceder en el terreno, cedió la tenencia y se dedicó a esperar algún fallo para salir disparado de contra.
A los seis, Edwuin Cetré hizo pasar de largo a su marcador, sacó un latigazo que pasó muy cerca del travesaño y casi estira la ventaja para el Tiburón. Sin embargo, fue la única llegada colombiana en el complemento. River empujó en busca del 1-1, estuvo cerca en la atropellada de Bruno Zuculini a los ocho, en el zurdazo de Milton Casco pasada la media hora y en el tiro de Jorge Carrascal a falta de cinco para el cierre.
Finalmente, luego de un tiro de esquina, Paulo Díaz saltó más alto que todos y convirtió el empate agónico para que el Millonario no se marche de Colombia con las manos vacías.
Con esta igualdad, el equipo de Gallardo sigue dando pelea: suma seis puntos y es escolta de Fluminense, que tiene ocho. Por su parte, Junior desperdició una chance inmejorable para quedar segundo y se deberá conformar con el tercer escalón de la tabla y tres unidades en cuatro partidos. Ahora, todo Núñez pasará rápido la página y empezará a pulir detalles de cara al Superclásico con Boca del domingo en la Bombonera.