En un repleto Estadio de Sarmiento, y una larga caravana que partió desde calle 3 y avenida Alvear, el hoy Frente de Todos Chaco recordó aquella épica victoria electoral de 2007 del entonces Frente Chaco Merece Más. El líder del espacio, y tres veces gobernador, repasó los logros centrales y habló de los desafíos. “Hoy siento la misma emoción de aquel memorable día y el amor entrañable del pueblo”, dijo con emoción.
Con una multitudinaria marcha, y un acto al que asistieron 25.000 personas en las instalaciones del Club Atlético Sarmiento, militantes y referentes políticos del actual Frente de Todos acompañaron al gobernador Jorge Capitanich, único orador, para celebrar los 15 años del triunfo electoral del Frente Chaco Merece Más, una histórica elección que, en 2007, llevó a su primera gestión al actual mandatario.
Pasadas las 17, la concentración comenzó en calle 3 y avenida Alvear, partiendo alrededor de las 18 rumbo al estadio de Sarmiento, donde tuvo lugar el acto central.
“Hoy 16 de septiembre de 2022 siento la misma emoción de aquel memorable día. Muchas gracias por estar y por compartir este momento. Siento el amor entrañable de un pueblo que empezó a alumbrar un mensaje de esperanza”, dijo Capitanich, único orador en un escenario donde lo acompañaron la vicegobernadora Analía Rach Quiroga, funcionarios del gobierno, legisladores provinciales y nacionales, intendentes y referentes de los diversos partidos y espacios que conforman el Frente de Todos.
“Recuerdo cada instante de aquel 16 de septiembre de 2007, cada abrazo, cada beso, cada mirada. Recuerdo la alegría de mi madre, que ya no está, el rostro reluciente de mi hija Jorgelina, las lágrimas de mi hija Guillermina, y de don Daniel que, con 92 años, también anidó en su corazón la victoria que era un homejane a nuestros abuelos gringos. Recuerdo cada mensaje y cada palabra de aliento. ¡Vamos que se puede! ¡Vamos que ganamos!”, repasó el mandatario.
“Hoy es momento de rendir homenaje a los que no están, a los que se fueron, a los que compartieron históricas luchas que nos permitieron garantizar el ejercicio del gobierno para satisfacer las demandas del pueblo chaqueño”, enfatizó.
Así, agradeció “a los partidos políticos, a los movimientos sociales, a militantes, a empresarios y trabajadores, a emprendedores, a intendentes e intendentas, legisladores provinciales y nacionales; a los vecinos y vecinas de cada pueblo que nos recibían con la esperanza de sentir que en nuestras entrañas estábamos anidando un futuro mejor para nuestra provincia”. “Un saludo a cada pueblo, paraje y localidad”, dijo, enumerando cada rincón del extenso territorio chaqueño que conoce metro a metro. “Gracias a los que confiaron. Gracias a los que creyeron”, agregó.
En esa línea, Capitanich resaltó que “en cada rincón del Chaco hay una obra, un derecho garantizado, una esperanza que hemos forjado”.
“Hoy tengo la misma fuerza de aquel 16 de septiembre. El esfuerzo vale la pena. Desde aquel memorable triunfo empezó, a partir del 10 de diciembre de 2007, un largo camino que aún no terminó. Así como podemos festejar obras, derechos y acciones, tenemos un compromiso irrenunciable para seguir trabajando por lo que nos falta”, sostuvo.
En otro tramo de un fervoroso discurso, que apenas superó la media hora, el gobernador recordó “a aquellos agoreros que presagiaban una derrota” en aquel septiembre de 2007. Pero dijo: “Siempre confiamos en el corazón del pueblo. Recuerdo cuando salíamos del Partido Justicialista, arrebatados por la emoción inminente de la victoria, subimos a una camioneta y de allí empezó una larga caravana hasta el mástil de avenida 9 de julio. Recuerdo saludar los rostros de chaqueños y chaqueñas que nos acompañaban. Una multitud en la calle nos acompañó espontáneamente para festejar una victoria que se nos había vedado después de 16 años”.
Entre aquellos recuerdos, Capitanich también mencionó a quienes ya no comparten el mismo espacio político: “Por circunstancias del destino muchas veces la política se bifurca y, los que estuvimos en 2007, ya no están hoy. Pero no nos vamos a olvidar de los que se fueron ni de los que están. Entendemos que, así como iniciamos ese proyecto junto a (Juan Carlos) Bacileff Ivanoff, hoy nos acompaña la primera vicegobernadora mujer de la historia constitucional de la provincia, que es Analía”.
“Fuimos capaces de construir un amplio acuerdo plural y democrático. Por eso quiero agradecer a quienes se animaron a acompañarnos en aquellos tiempos, porque no era fácil. A todos los partidos políticos que fueron capaces de inspirarse en una necesidad para proyectarse al futuro”, acotó.
“Nunca fue fácil gobernar”
Capitanich reconoció que “nunca fue fácil gobernar el país ni la provincia”, y también que, por primera vez en 69 años de historia constitucional de la provincia y 71 años de historia como provincia, “un proyecto político se mantendrá durante 16 años en forma ininterrumpida a través de la voluntad popular manifestada por el voto de cada ciudadano”.
“Fuimos capaces de recuperar la provincia después de 16 años, pero cuando me tocó arremangarme fui candidato a intendente para recuperar luego de 16 años la intendencia de Resistencia”, subrayó. Así, sumó: “Hoy, después de 144 años de historia, por primera vez el justicialismo y sus aliados tienen dos mandatos constitucionales seguidos en esta ciudad”.
En ese recuento de hitos históricos, mencionó que fue electo en tres ocasiones gobernador del Chaco y, además, por primera vez en el actual mandato se respeta la igualdad de género en el gabinete provincial. “Por primera vez tenemos una política ambiental para defender nuestros recursos, por primera vez hicimos valer la política de derechos humanos de memoria, verdad y justicia”, agregó.
“El pueblo nos eligió a nosotros porque éramos capaces de poner límites al autoritarismo y al avasallamiento indiscriminado de derechos por quienes gobernaban en ese tiempo”, sostuvo el gobernador.
En ese punto, enfatizó que su gobierno sentó las bases para la construcción de “una justicia autónoma e independiente, eligiendo a los jueces del STJ mediante concursos de antecedentes, oposición y audiencias públicas. Somos un ejemplo para Argentina y el mundo”.
“Toda esa confianza no fue un vano”
“Pero esa confianza no fue un vano. Ni tampoco un cheque en blanco. Fuimos capaces de hacer realidad sueños y esperanzas”, resaltó, para luego enumerar los hitos de sus mandatos: “Terminaremos cerca de 1200 kilómetros de rutas, un récord histórico en la vida institucional de la provincia; más de 14.000 cuadras de pavimento urbano; más de 800 nuevas escuelas e intervenir en 1000, 52 hospitales, 65.000 viviendas, 92 comisarías, 150 centros de salud, iglesias, clubes. Recuperamos el Norte Grande; la hidrovía; los bajos submeridionales; empezaremos el puente Chaco- Corrientes”.
En ese recuento dijo que durante sus gestiones, Chaco triplicó la capacidad instalada en materia energética, pasó de tener dos acueductos a 24, pasando de 384 kilómetros a 1400 kilómetros; y de 148 mil a 360 mil conexiones de agua potable en todo el territorio. “Eso implica un cambio en el paradigma y en la calidad de vida”, subrayó. Agregó a esos números las 36 mil conexiones eléctricas rurales, los 458.000 usuarios de energía eléctrica y la meta de llegar a 3000 km de fibra óptica, con cada hogar, escuela y hospital provistos con la última milla.
“En el Chaco, en el año 2007, no había gas. Hoy tenemos un gasoducto troncal, 38 ramales de aproximación y empezamos con las 13.000 conexiones domiciliarias”, indicó.
En ese recuento, Capitanich también mencionó: “Incluimos niños y niñas desde 45 días a 4 años, salas de 4 y de 5; instauramos la jornada extendida en Primaria y cumplimos el desafío de construir una educación secundaria de calidad. Aceptamos el desafío de mejorar. Extendimos terciarios y edificios. Llegamos a nuestras localidades”. Asimismo, destacó todos los avances en nueva y mejor infraestructura, garantizando más derechos y política de ingresos.
Además, aseguró que se cumplirá en la provincia la meta de entregar 30 mil títulos de propiedad urbana, 8000 títulos de propiedad rural, 12000 títulos de adjudicación de viviendas y 65.000 soluciones habitacionales para garantizar una vida digna a cada chaqueño y chaqueña.
Una tierra de esperanza
Las comunidades indígenas fueron otro eje de su discurso, cuando Capitanich reconoció: “Hemos aprendido de ellas la protección del ambiente, el diálogo intercultural, el asociativismo comunitario; de nuestras colectividades extranjeras, el ímpetu por el esfuerzo y el trabajo: y de nuestras comunidades criollas, el arraigo a la tierra y los desafíos para la construcción de un futuro”.
“Chaco es una tierra de esperanza. Tenemos un Polo Tecnológico en Fontana y el desarrollo de la economía del conocimiento; estamos avanzando en la producción de pelotas de fútbol, en indumentaria deportiva, en la cadena de valor textil, en la cadena foresto-industrial, en producción de cereales, oleaginosas, en la transformación en cadenas cárnicas para la generación de nuevos empleos”, enumeró, resaltando los avances logrados hacia el desarrollo industrial.
Luego, apuntó: “El camino que trazamos fue primero garantizar infraestructura social básica; luego, promover la ejecución de derechos y finalmente perfeccionar una política de ingresos que logre reducir los niveles de pobreza. Claro que nos falta. Tenemos el flagelo de la inflación en el país y una política de ingresos siempre resulta insuficiente para resolver problemas estructurales en nuestras provincias. Pero hemos hecho mucho”.
Así, valoró los efectos de las políticas sociales nacionales, mencionando la jubilación de las amas de casa, la Asignación Universal por Hijo; y las políticas en salud que hicieron obligatorias 19 vacunas. “Gracias al Estado presente logramos en pandemia salvar miles de vidas”, enfatizó. “Estamos construyendo la mayor red de hospitales y centros de salud”, agregó.
“En 2007 pedí una oportunidad y sentimos que fuimos capaces de honrar nuestros compromisos”, afirmó Capitanich. Y agregó. “En estos últimos 15 años me he dedicado a trabajar a sol y sombra, honrando el compromiso asumido con cada uno de nuestros hermanos y hermanas”.
Casi sobre el final, Capitanich se refirió al momento que vive el país, con situaciones de violencia. “Respetamos la democracia, a nuestros opositores, no perseguimos a nadie, somos capaces de defender fielmente el estado de derecho y la convivencia pacífica y civilizada”.
En esa línea, dijo con énfasis: “La Argentina y el Chaco tienen que garantizar el pacto democrático, donde los derechos humanos, la estabilidad de las instituciones democráticas y el desafío de un proyecto en común sean la base para la construcción de un destino de grandeza”.
“Argentina vive un período de violencia verbal, traducido en violencia política. Tenemos que ser capaces de desterrar la violencia en cualquiera de sus formas. Nosotros constituimos un movimiento nacional, popular, democrático que promueve la paz, la no violencia, el respeto y los valores del amor. Porque el amor no solo vence al odio, sino que es la base fundante de principios y valores de una provincia y una Nación”, subrayó.
Por eso, sostuvo: “No pierdo ni un segundo de mi tiempo contestando agravios, injurias y agresiones. Pongo todo mi esfuerzo, sacrificando día y noche, con acciones que pueden mejorar la vida de la gente”.
“Siempre estoy con el corazón puesto en el pueblo y la mente dispuesta a sacrificar los años de mi vida para hacer del Chaco sea la provincia potencia en Argentina”, arengó. Y cerró: “Gracias por el afecto, por el compromiso, por participar hoy, por abrazarnos, por soñar, por esperar, por construir, por tener el coraje y la valentía de superar las adversidades. Vamos todos a construir la victoria para siempre y por siempre”.