La provincia del Chaco redujo en cinco puntos la indigencia interanual y sostiene una tendencia a la desaceleración de este indicador, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) publicados este jueves en el informe «Incidencia de la pobreza y la indigencia en 31 aglomerados urbanos» que reúne información del último semestre de 2022.
Según el informe, en el segundo semestre de 2022 la indigencia en personas representa un 14,4%, cinco puntos menos que en 2021, cuando la cifra alcanzaba un 19,4%. Esta tendencia a la desaceleración se sostiene en las medidas de protección a los sectores más vulnerables impulsadas por el Gobierno provincial.
Esta cifra se relaciona directamente con la estructura de empleo de la provincia, que cuenta con un 60% de empleo formal y un 40% de empleo informal, “lo que deja sin herramientas de negociación salarial colectiva a una gran parte del sector de los trabajadores”, advirtió el subsecretario de Política Económica, Sebastián Martínez.
La disminución de la indigencia en un contexto de aumento de la pobreza, se relaciona a un problema de coyuntura macroeconómica, definido por “el aumento de los precios por encima de los salarios formales en un contexto inflacionario”, explicó el funcionario.
En promedio, en los dos últimos años la indigencia en personas representa un 15,9% en la provincia. Con un 14,4% en el último semestre, Chaco se ubica por debajo de este promedio en los dos últimos años, lo que indica una tendencia a la reducción de ese indicador.
“Estas medidas demuestran una desaceleración en la indigencia en este período de dos años, caracterizado por un incremento de los precios a mayor velocidad que los salarios formales”, amplió Martínez.
El subsecretario remarcó además que la estructura del mercado laboral del empleo en la provincia “presenta una importante participación del empleo informal. Estas dos cuestiones están detrás hoy de los números de pobreza e indigencia”.
“En términos generales, el Estado provincial no tiene incidencia sobre los salarios del sector privado, pero sí tenemos incidencia directa en los salarios del sector público. Con 80.000 familias, hay una buena parte de la provincia cuyo ingreso principal es del sector público. De las herramientas que tenemos, la principal es el salario público y el compromiso de defenderlo frente a la inflación”
Además, el funcionario destacó la importancia de avanzar en un sistema de medición multidimensional de la pobreza. “Actualmente la pobreza se mide únicamente a través de los ingresos, pero sabemos que es un fenómeno mucho más complejo vinculado a la cobertura y al acceso a derechos en materia de educación, salud, infraestructura social básica, entre otros factores socioeconómicos”
En ese contexto, el Gobierno provincial impulsa una serie de medidas de protección de los salarios frente a la inflación y de mejora del poder adquisitivo de las familias chaqueñas. Paralelamente a las negociaciones salariales, se concretaron medidas como las promociones de Superdías en 2022, y este año con las promociones de Ahorrá Chaco para la vuelta a clases, el boleto docente bajo el programa “Vamos a enseñar”, y diversas medidas de refuerzo de ingresos.
Políticas públicas para reducir la informalidad
Paralelamente, la tasa de desocupación en el Gran Resistencia registró una fuerte caída de 4,3 puntos porcentuales, ya que, en el cuarto trimestre del 2021, el desempleo había llegado al 8,4% en el área metropolitana.
En el cuarto trimestre de 2022 fue de 4,1%, ubicándose muy por debajo de la media nacional, que fue del 6,3%, según informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) en la Encuesta Permanente de Hogares (EPH).
De esta manera, el área metropolitana del Chaco se posicionó entre los conglomerados urbanos con menor índice de desempleo de la Argentina.
“Estamos convencidos de que la única herramienta para bajar la pobreza de manera sostenida es la generación de empleo. Hoy Chaco se encuentra en un proceso de crecimiento sostenido del empleo privado formal donde ya superamos los 101.000 puestos de trabajo formales por primera vez en su historia”, destacó el subsecretario de Política Económica.
Además, en febrero pasado, el aglomerado urbano del Gran Resistencia, compuesto por las localidades de Resistencia, Barranqueras, Puerto Vilelas y Fontana, se posicionó entre los ocho aglomerados urbanos del país que alcanzaron el pleno empleo. Así lo determinó el informe “Mercado de trabajo – Tasas e indicadores socioeconómicos”, publicado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
Los datos, disponibles para su consulta en https://cutt.ly/l91lUUN, corresponden al tercer trimestre del año pasado y si bien la cifra no equivale a desocupación cero, constituye un avance en materia de indicadores para el Gran Resistencia, en el que la tasa de desocupación alcanza actualmente al 4 %. A nivel país, la cifra es del 7,1%.
Este indicador, positivo para la provincia, surge como consecuencia de las políticas de impulso al empleo del Gobierno provincial, y el esfuerzo del sector empresarial, a través de una serie de programas e iniciativas de fomento.
En los últimos tres años el Gobierno provincial puso en marcha una serie de herramientas de asistencia económica directa para incentivar la generación de empleo privado formal. En la actualidad, son 13 los programas que brindan aportes salariales mensuales a unas 611 pequeñas y medianas empresas chaqueñas por cada una de las 9.527 personas que están siendo empleadas o capacitadas.