Alberto Fernández extendió la cuarentena hasta el 20 de septiembre y autorizó las reuniones sociales de hasta 10 personas al aire libre para todo el país.

El presidente habló por medio de un mensaje grabado que se esperaba para las primeras horas de la tarde pero se emitió cerca de las 20 y lo hizo en soledad por primera vez en meses en los que se había mostrado sin falta junto a Axel Kicillof y Horacio Rodríguez Larreta. 

El nuevo formato obedece, según confirmaron en el gobierno, a que el presidente busca descentralizar la crisis del coronavirus y delegar en los gobernadores parte del costo político por la suba de contagios en el interior.

En ese sentido el presidente dijo que el virus ya es un problema nacional y que hay 18 provincias que tienen circulación comunitaria.

«Cuando empezábamos a dominar el virus en el AMBA, nos dimos cuenta que se había diseminado en todo el país. Este tiempo nos exige ahora volcar nuestra mirada al interior del país, no vamos a dejarlos solos», dijo Alberto más temprano desde Santa Fe, en lo que pareció una autocrítica.