La Secretaría de Derechos Humanos Y Géneros garantiza la protección y defensa de los derechos humanos para evitar cualquier tipo de abuso a la autoridad por parte de las fuerzas policiales.

Se encuentra vigente la Guardia de Derechos Humanos, la línea de atención 24 horas, disponible a través del 362 4746518. 

El gobierno provincial chaqueño informa que se encuentran vigentes y activas las políticas de protección y defensa de los derechos humanos en el marco del aislamiento social preventivo obligatorio por coronavirus.

Desde la Secretaría de Derechos Humanos y Géneros y el Ministerio de Seguridad y Justicia, se articulan las medidas de protección correspondientes. 

La línea telefónica de la Guardia, dependiente de la Subsecretaría de Derechos Humanos, se encuentra operativa y recibe denuncias y reclamos en casos de violencia policial al número 362 4746518. 

Al respecto, la secretaria de Derechos Humanos y Géneros, Silvana Pérez, señaló que “los organismos de control están presentes, la gente puede denunciar situaciones de violencia policial. Todos los días trabajamos en ese sentido y el estado provincial mantiene intactos los órganos para proteger y garantizar los derechos humanos”. 

La funcionaria se dirigió específicamente a la ciudadanía: “Cuando exista una denuncia, sepan que tendrán asesoramiento y acompañamiento jurídico, psicológico y social. Se denunciarán y controlarán abusos de poder”. 

La ministra de Seguridad y Justicia, Gloria Zalazar, destacó el trabajo conjunto del ministerio y la secretaría, “El trabajo conjunto con la secretaría de derechos humanos y géneros es un orgullo para este gobierno, porque se articulan las políticas de prevención de violencia institucional y se refuerza el respeto a los derechos humanos de los ciudadanos chaqueños. Este es un paso institucional de profunda transformación para la provincia”. 

Por su parte, la subsecretaria de Derechos Humanos Nayla Bosch explicó que el equipo interdisciplinario que compone esta guardia continúa trabajando las 24 horas, aunque por el contexto actual, de manera principalmente telefónica, a través de la línea de emergencia 362 4746518. 

“Lo que realiza la Subsecretaría es recepcionar el caso y acompañar a la persona en lo que corresponda; si desea realizar una denuncia se le da asesoramiento de cómo hacerla, si requiere atención medica se la viabiliza, si requiere articulación con la defensa pública, se la asesora al respecto”, explicó. Asimismo, agregó que este trabajo se realiza de manera articulada con el Ministerio de Seguridad y Justicia, la Policía del Chaco y el Servicio Penitenciario, para “consolidar los derechos humanos de los chaqueños y chaqueñas y erradicar las violencias”. 

Protocolo para personas en contexto de encierro

 Es así que, durante este periodo de aislamiento social, se está desarrollando un protocolo particular para personas en contexto de encierro, conjuntamente entre los ministerios de Seguridad y Salud, la Secretaría de Derechos Humanos y Géneros, el Ministerio de Salud Pública, la Policía del Chaco, el Servicio Penitenciario y el Comité para la prevención de la Tortura. 

Este protocolo contempla las garantías constitucionales para las personas privadas de su libertad durante este periodo de cuarentena y forma parte del protocolo general que se determinó para la regulación de las detenciones resultantes de violación al aislamiento social obligatorio. 

“Se trabaja con el Ministerio de Seguridad, que es quien coordina el armado del protocolo para las personas privadas de la libertad, para que se contemple, entre otras cuestiones, la generación de nuevos métodos y estrategias para garantizar la comunicación con los seres queridos desde los lugares de detención, así como también regular las normas de higiene y el cuidado de la salud tanto de detenidos como de personal penitenciario y policial”, preciso la subsecretaria. 

Así, la funcionaria aseguro que estas acciones del gobierno provincial buscan cuidar tres poblaciones: las personas privadas de su libertad, el personal policial y penitenciario, y la comunidad en general. Finalmente, mencionó que se trabaja en la búsqueda de medidas alternativas a las detenciones, teniendo en cuenta la superpoblación tanto en comisarías como en unidades penitenciarias, y en la generación de espacios para posibles aislamientos de personas, en caso de ser necesario.

“Debemos estar preparados para ofrecer los cuidados a la salud que sean necesarios y reducir al máximo el hacinamiento”, remarcó.