A una semana de la gran final de la Copa Libertadores ante River, un cuadro de paperas en cuatro juveniles de Boca encendieron las alarmas en el cuerpo médico, que profundizarán los cuidados internos para que la enfermedad no se propague al plantel de Primera División.

Los casos de paperas, que se dieron a conocer esta mañana, afectan a cuatro jugadores de las divisiones inferiores, que viven en la pensión del club, donde también duermen el defensor Leonardo Balerdi y el mediocampista Gonzalo Lamardo, que forman parte del plantel profesional.

Si bien no presenta síntomas de ningún tipo, Balerdi convive con varios de los chicos en la pensión, donde desayunan, almuerzan, meriendan y cenan, además de pasar mucho tiempo compartido. Por lo que aumentarían los riesgos de contagio.

Según trascendió en los medios que siguen a diario la actividad de Boca, hay otros diez jugadores de las Inferiores con síntomas y fueron licenciados para evitar que el virus se siga propagando.

Además, como otra medida de prevención, este fin de semana se cerrará la pensión para cortar el brote de la enfermedad y los jugadores irían a descansar a un hotel.

Otro de los reacudos es que el defensor oriundo de Villa Mercedes, que será titular este sábado ante Patronato por la decimotercera fecha de la Superliga, dormirá solo en el hotel durante la concentración.

¿Qué son las paperas? Los expertos en medicina la definen como una enfermedad contagiosa que causa una inflamación dolorosa de las glándulas salivales.

Es producida por un virus que se transmite de una persona a otra por medio de las gotas de la humedad de la nariz o la boca, como por ejemplo, cuando una persona estornuda. También se propaga a través del contacto directo con artículos que contienen saliva infectada.

El tiempo que transcurre entre la exposición al virus y el momento de resultar enfermo (período de incubación) es aproximadamente de 12 a 25 días.