PRONÓSTICO EXTENDIDO

El Gobierno busca destrabar un préstamo de 140 millones de dólares para ayudar a las provincias en emergencia

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El Gobierno busca destrabar un préstamo de 140 millones de dólares del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para asistir de emergencia a un grupo de economías regionales que se vieron afectadas por una helada en las provincias cordilleranas. Además de la urgencia climática, el Ministerio de Economía espera ampliar de esta manera el financiamiento en dólares por la vía de los préstamos de organismos internacionales.

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Se trataría en este caso de dos líneas diferentes de crédito que aparecen en el radar del equipo económico: una de 100 millones de dólares de desembolsos no reembolsables y una de 40 millones de dólares a 10 años que sería dirigido al sector privado como asistencia ante la helada, según comentaron fuentes oficiales.

Las medidas que anunciará el Gobierno serán dadas a conocer este lunes por el ministro Sergio Massa desde Mendoza y se prevé que haya facilidades fiscales y asistencia por la vía del financiamiento.

“El cambio climático está haciendo un gran daño en los sistemas productivos. En los últimos días, una helada tardía proveniente del Pacífico, destruyó parte de la producción de las economías cordilleranas, afectando a Mendoza, San Juan, Río Negro, Neuquén y Catamarca, entre otras”, señaló el ministro en desde su cuenta de Twitter. “Estas provincias –prosiguió- ven destruido el esfuerzo y el trabajo de sus productores y la vitalidad de sus economías regionales, desde uvas a cerezas, desde peras y manzanas, hasta zapallos y nogales, dejándolas en una situación grave y crítica”.

Convocatoria

Ante esa situación Economía convocó a los ministros de producción provinciales y a sectores afectados a una reunión el lunes, “para poner en marcha un conjunto de medidas fiscales y crediticias para proteger al sector”.

“En paralelo –completó Massa su hilo tuitero- vamos a exigir al Banco Interamericano de Desarrollo la apertura del proceso de desembolsos por emergencias climáticas, para poner a disposición la mayor cantidad posible de recursos con el fin de mantener en pie y produciendo a nuestras economías regionales”.

Fuente: Twitter

Fuente: Twitter

Un comunicado reciente de la Federación Agraria Argentina (FAA) había alertado qué economías regionales y en qué medida fueron afectadas en los últimos días.

“Las fuertes heladas que cayeron el domingo 30, y principalmente el lunes 31 de octubre, generaron grandes complicaciones en los productores que aseguraron que entre el 80 y el 100 por ciento de la producción se vio afectada debido a las bajas temperaturas registradas”, mencionaron en el caso de Mendoza.

“Lo propio aconteció en San Juan, donde varios departamentos se vieron afectados por la caída de la helada tardía, en plena primavera, con mayores daños en plantaciones de melón, tomates y uvas, así como también en Cafayate, Salta, con pérdidas cuantiosas”, continuó la entidad rural.

Comahue y Tucumán

“En el Alto Valle de Río Negro, viñedos, cerezos y nogales y plantaciones de zapallos, entre otras producciones, fueron dañados con la helada tardía registrada el lunes 31 de octubre, dejando sin producción a los productores de Río Negro y Neuquén, provocando un golpe profundo al sistema productivo”, aseguró la FAA por otra parte.

Por último, sostuvieron que “en Tucumán especialmente en la localidad de Simoca, o en Leales o Viclos, se han producido graves daños como consecuencia de las heladas en las producciones de zapallitos, sandía, batata, maíz, dejando un panorama desolador para los pequeños y medianos productores. En la zona la situación es considerada de ‘desastre’ y suma preocupación la falta de lluvias”.

 Reuters 163

(Reuters)

Una industria en peligro por las heladas es la del vino. “Las dos últimas noches de octubre, después de tres décadas, fueron las más largas y oscuras para productores y bodegas de nuestro país. Las condiciones atmosféricas trajeron consigo heladas tardías, una de las adversidades climáticas más difíciles de enfrentar para la agricultura en general y la vitivinicultura en particular”, aseguró un comunicado de Bodegas de Argentina, la principal cámara sectorial.

Además, la entidad manifestó su “preocupación de productores y bodegas frente al nivel de pérdidas y solicita al estado nacional, estados provinciales y municipales el acompañamiento económico que tan extrema situación amerita. Mermas en la producción que en algunos casos llegan a ser totales, deben ser amparadas por los mecanismos de crisis previstos para estas situaciones, créditos accesibles, baja o suspensión de impuestos, tasas, aportes y contribuciones que habitualmente aportan quienes producen uvas y vinos, eliminación de acuerdos y leyes que se dictaron con el solo objetivo de controlar un stock y una producción que está vez, será dominada por la escasez”.

Salvavidas multilateral

Los créditos de organismos bilaterales de crédito son la única canilla de financiamiento en moneda dura que le quedó disponible al país tras el cierre de los mercados de deuda hace cuatro años y medio. El aporte que harán este año y el que viene ese grupo de entidades multilaterales es considerable: de acuerdo a estimaciones oficiales, sumará 0,4% del Producto Bruto Interno este año y otros 0,2% del PBI el año que viene.

La fuente de tensión entre la Casa Rosada y los organismos -principalmente el BID- estuvo relacionada hace algunos meses con el ritmo en el que esos desembolsos comprometidos llegaron a destino. Una de las razones por las que el Gobierno y el FMI consideraron que el país no pudo cumplir con la meta de acumulación de reservas en el Banco Central del segundo trimestre acordada con el Fondo Monetario estuvo relacionada con la demora en el giro de esas divisas, algo que, aseguran desde el equipo económico, debería acelerar en las últimas semanas del año.