Los precios del petróleo repuntaron con fuerza este jueves, un día después de una jornada negra de desplomes, gracias a las medidas de estímulo, el interés provocado por los bajos precios y señales de alivio en la guerra entre Rusia y Arabia Saudita.
El barril de WTI, petróleo de referencia en Estados Unidos, para entrega en abril valía 26,15 dólares, un 25,4% más que al cierre de la víspera, tras haber pasado brevemente por encima de los 25 dólares.
Por su parte, el barril de Brent del mar del Norte para entrega de mayo subía un 15% en Londres a 28,57 dólares.
El miércoles fue uno de los peores días en la historia de ambos crudos de referencia: el WTI cayó un 24,4% a 20,37 dólares y el Brent, un 13% a 24,88 dólares.
La ausencia de nuevas contaminaciones locales en China el jueves fue uno de los factores que dio esperanza a los mercados, explicó a AFP la analista de Gain Capital, Fiona Cincotta, refiriéndose a «una luz al final del túnel» para los inversores.
La preocupación que rodea a la vez a la oferta y la demanda de oro negro y el clima general de pánico en los mercados están causando una volatilidad muy alta, haciendo que «los porcentajes de dos dígitos sean un hábito casi diario», señala el analista de la SEB Bjarne Schieldrop.
Entre los anuncios que tranquilizaron a los inversores el jueves figuraban las medidas anunciadas por los bancos centrales de todo el mundo para contrarrestar la esperada conmoción económica de la pandemia de coronavirus.
El Banco de Inglaterra hizo otro sorpresivo recorte de su principal tasa de interés el jueves, al mínimo histórico de 0,1%, y decidió aumentar su programa de compra de bonos en 200.000 millones de libras hasta 645.000 millones.