Adele, quien ha tenido cambios de imagen como todas las celebridades, hizo de este 2019 un año de cambios drásticos para retomar una figura delgada (que nunca ha tenido).
Este 2019 se divorció de su marido tras siete años de relación y estuvo alejada de las redes sociales. Entre sus últimas fotos destaca una durante la celebración del cumpleños 33 de Drake.
Ya ahí se la veía más sexy mostrando hombros. Pero, sorpresivamente para las fiestas de Navidad volvió con fotos donde luce mucho más flaca que a comienzos de año.
No es preciso el peso que ha perdido, algunos medios aseguran que bajó 20 kilos este año y un total de 70 desde 2010.
Ahora, con solo 31 años, tiene dos secretos para su nueva figura: el pilates y una dieta estricta.
La cantante británica prefiere mostrar los resultados luego de sus esfuerzos, y a decir de sus cercanos, prefiere ejercitarse en su casa. Por ello cuenta con la ayuda de un coach e influencer que la anima a perseguir sus sueños y el otro es un entrenador personal.
Joe Wicks es el joven que despertó en Adele la motivación de mejorar su calidad de vida, tiene casi 3 millones de seguidores en Instagram. También conocido como » The Body Coach» se especializa en entrenamientos cortos de intervalos de alta intensidad.
A su vez, combina estos ejercicios con una dieta balanceada rica en fibras. Suele compartir recetas saludables en sus posteos para incitar a sus seguidores a hacer postres bajos en calorías que resulten nutritivos y ricos.
Dalton Wong, conocido como «el entrenador de las estrellas», le organiza las rutinas de ejercicios a la intérprete. Se conoce que Wong también es el personal trainer de Jennifer Lawrence, amiga de Adele.
Los propósitos de Adele para el 2020 es seguir con sus rutinas de ejercicio. «Antes solía llorar, ahora prefiero transpirar», escribió en su cuenta de Instagram, acompañando una fotografía que da cuenta de un sorprendente cambio. (E)