El Chavo del 8 y toda la obra de Chespirito tuvieron especial repercusión en nuestro país. Tanto es así que aún hoy las nuevas generaciones conocen a estos personajes creados hace casi 50 años por Roberto Gómez Bolaños.
Entre la troupe de la vecindad, una de las figuras descollantes era Don Ramón, el padre de la Chilindrina, eterno deudor de «la renta» y protagonista de memorables «duelos» actorales con Quico, la Bruja del 71, Doña Florinda y el propio Chavo.