Berian y Fraile realizaban un documental sobre la Caa Furtiva. Un grupo islamista se adjudicó la emboscada. Contaban con gran experiencia en zonas de conflicto.
Los periodistas españoles David Beriain (Artajona, Navarra, 43 años) y Roberto Fraile (Barakaldo, Bizkaia, 47 años), que estaban desaparecidos desde este lunes en Burkina Faso después de que el convoy en el que viajaban por el este del país sufriera el ataque de un grupo armado, han muerto, según ha informado la ministra de Exteriores, Arancha González Laya.
Ambos reporteros y un ciudadano irlandés que viajaba con ellos han sido asesinados en un ataque de un grupo de hombres armados que asaltó el convoy en el que los tres se desplazaban.
El ataque se produjo sobre las nueve de la mañana del lunes en la carretera que une Fada N’Gourma y Pama. Los reporteros habían acudido a esta zona, próxima al parque nacional de Arli, para rodar un documental sobre la lucha de las autoridades burkinesas contra la caza furtiva.
El convoy, integrado por dos vehículos tipo pick-up y unas 20 motocicletas en los que viajaban periodistas, agentes medioambientales y una escolta militar de seguridad, partió por la mañana de la localidad de Natiaboani y se detuvo en el kilómetro 60.
Los españoles desaparecidos habían descendido de una de las pickups y manipulaban un dron para tomar fotografías aéreas cuando comenzó el ataque. Hombres armados irrumpieron en dos camionetas y una decena de motos, lo que provocó que los integrantes del convoy se dispersaran, según fuentes de seguridad.
Miembros de la escolta y un ciudadano extranjero que resultó herido lograron llegar a Natiaboani. La Embajada de España en Malí, acreditada en Burkina Faso, se ha mantenido en contacto con las familias de los dos fallecidos.
‘Es una zona peligrosa, campo habitual de grupos terroristas y bandidos‘, aseguró González Laya.
La autoría del asesinato de los dos periodistas y del ciudadano irlandés que les acompañaba ha sido asumida, a través de un mensaje de audio que está pendiente de verificación, por el Grupo de Apoyo al Islam y los Musulmanes (JNIM), una federación de grupos yihadistas liderada por el terrorista Iyad Ag Ghali y que está vinculada a Al Qaeda.
Alfonso Bauluz, secretario general en España de Reporteros Sin Fronteras y portavoz de las familias de los fallecidos, ha destacado el carácter ‘muy humano y noble‘ de Beriain y Fraile.
La familia y los compañeros de la productora del primero, 93 Metros, recibieron este lunes una llamada suya, como ocurría habitualmente cuando estaba trabajando fuera de España.
‘Era una persona muy concienzuda y sabía que a los viajes había que ir provisto de sistemas de comunicación. Llevaba un teléfono satelital Thuraya‘, ha descrito Bauluz, que detalla que, después de ese contacto, llegaron noticias ‘confusas‘, que daban por desaparecidas a unas personas en la zona donde estaba el reportero y el cámara, desplazados desde hacía días para un trabajo sobre el furtivismo, y otras que señalaban que habían regresado a la base donde se alojaban, informa José M. Abad Liñán.
David Beriain tenía una amplia experiencia como reportero en zonas de conflicto. A lo largo de su carrera periodística había trabajado, además de en Irak, en Afganistán, República Democrática del Congo, Sudán, Libia, México, Colombia o Venezuela.
Especializado en documentales, su reportaje Diez días con la FARC le valió en 2009 el premio de periodismo digital José Manuel Porquet, mientras que su documental El negocio del secuestro en Venezuela fue nominado en 2019 a los premios RealScreen.
El cámara Roberto Fraile también era experto en zonas complicadas. Resultó herido en la localidad siria de Alepo por el estallido de una granada. Uno de sus trabajos más conocidos, junto a David Beriain, fue Clandestino, una serie de documentales que se emitió en el canal Discovery Max.