La Administración Trump está preparando una propuesta de infraestructura de casi US$1 billón (1.000 millones de dólares) como parte de su impulso para reanimar la mayor economía del mundo, según dijeron fuentes cercanas al plan.
Una versión preliminar que está preparando el Departamento de Transporte reservaría la mayor parte de los fondos para tareas de infraestructura tradicional, como carreteras y puentes, pero también destinaría capital a infraestructura inalámbrica 5G y banda ancha rural, dijeron las fuentes del caso.
Está previsto que el presidente Donald Trump hable del acceso a banda ancha rural en un evento de la Casa Blanca el jueves.
Una ley existente de financiamiento de infraestructura de EE.UU. debe renovarse para el 30 de septiembre, y la Administración considera que es un posible vehículo para impulsar un paquete más amplio, dijeron las personas que pidieron que no se revelara su identidad porque la propuesta de Trump no es definitiva y no ha sido anunciada.
Los congresistas de ambos partidos y Trump están debatiendo el momento y el alcance de nuevas medidas de estímulo para una economía estadounidense sumida en la recesión por las medidas de aislamiento nacionales para frenar la propagación del coronavirus.
Es la indicación más reciente de un impulso de Washington para un gasto intenso en infraestructura antes de las elecciones.
Los demócratas de la Cámara de Representantes han ofrecido su propia propuesta de US$500.000 millones para renovar los fondos de infraestructura en un período de cinco años.
No está claro cuánto tiempo el borrador de la Administración autorizaría el gasto o cómo pagaría los programas. Trump está presionando para impulsar la economía de EE.UU., que hace cuatro meses era la pieza central de su argumento para un segundo mandato.
La mayoría de las encuestas nacionales lo sitúan a la zaga del demócrata Joe Biden. La Casa Blanca ha explorado formas de modificar la próxima ronda de ayuda federal contra el virus, del apoyo económico personal a iniciativas que fomentan el crecimiento, como el gasto en infraestructura.
“Desde que asumió el cargo, el presidente Trump ha tomado en serio un paquete de infraestructura bipartidista de reconstrucción de nuestras carreteras y puentes en ruinas, inversión en futuras industrias y promoción de la eficiencia de los permisos”, dijo la portavoz de la Casa Blanca, Judd Deere, en un comunicado.
Trump ha hecho llamamientos reiterados para más gasto en infraestructura, incluso durante su campaña presidencial de 2016. En marzo, cuando la pandemia se intensificó en Estados Unidos, el presidente instó a nuevas inversiones en carreteras, puentes y túneles estadounidenses de hasta US$2 billones.
La propuesta se hacía eco de su iniciativa de hace dos años para que el Congreso destine US$1,5 billones a nuevas inversiones en infraestructura.
Pero las esperanzas de una legislación federal se desvanecieron en mayo de 2019 después de que los demócratas dijeran que Trump salió de una reunión para un plan de US$2 billones y prometió no trabajar con ellos a menos que dejasen de investigarlo a él y a su Administración.
Es posible que las medidas de infraestructura que se están redactando actualmente se incluyan en la próxima ronda de ayuda pandémica.
La Cámara de Representantes aprobó un estímulo adicional de US $3 billones en mayo, pero el Senado, liderado por los republicanos, rechazó ese proyecto de ley y, en cambio, sopesará sus opciones el próximo mes.