El Reino Unido prohibió el martes llevar en la cabina computadoras y tablets en vuelos desde seis países de Medio Oriente, sumándose así a la polémica medida anunciada por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
A diferencia de la medida estadounidense, que lo impide desde ocho países de Medio Oriente, en este caso serían sólo seis: Turquía, el Líbano, Jordania, Egipto, Túnez y Arabia Saudita.
El gobierno de Theresa May aseguró que la medida fue tomada tras mantener contactos con Washington para entender sus posición al respecto.
En ambos casos los dispositivos electrónicos más grandes que un teléfono normal deberán ser despachados en la bodega del avión obligatoriamente.
La restricción está basada en reportes de inteligencia que apuntan a un posible ataque utilizando explosivos dentro de estos dispositivos, según consigna la cadena BBC.
Los reportes citan el atentado contra un avión de pasajeros ruso que volaba sobre Egipto en 2015, que estalló por una bomba llevada en la cabina, así como el ataque de 2016 a un vuelo de Turkish Airlines en el que un artefacto explosivo escondido dentro de una computadora portátil estalló sin provocar grandes daños, como antecedentes.
A diferencia de lo ocurrido con el veto migratorio de Donald Trump, muchos de los países incluidos en esta lista tienen buenas relaciones tanto con Estados Unidos como con el Reino Unido, por lo que la decisión podría tener consecuencias diplomáticas.
