El ex presidente de Bolivia, Evo Morales, cuestionó duramente a la OEA por su «rol político en la crisis que desembocó en su renuncia el pasado domingo, y aseguró que el organismo que lidera el uruguayo Luis Almagro «responde al imperio norteamericano».

Durante su comparecencia ante la prensa en el Museo de la Ciudad de México, casi 24 horas después de llegar al país como asilado político, Morales defendió su cuestionado triunfo en las elecciones del 20 de octubre y volvió a justificar su ventaja sobre Mesa luego que se interrumpiera el conteo por casi 24 horas por el cuantioso voto rural a su favor.

«El 21 de octubre, partidos que perdieron dijeron ¡fraude! y convocaron a la movilización quisieron quemar tribunales departamentales y las actas de escrutinio. Nunca en mi vida he pedido a instituciones que hagan una cosa ilegal como mentir o robar», aseguró Morales, quien añadió que como prueba de su transparencia había pedido que instituciones internacionales fueran a Bolivia a verificar si había habido fraude o no en los comicios.

En ese sentido, el ex presidente cuestionó duramente el accionar de la OEA por su rol «político y no técnico o jurídico» en la crisis que derivó en su renuncia y declaró que el organismo «no está al servicio del pueblo sudamericano, está al servicio del imperio norteamericano».

Morales reveló además haberle dicho a Almagro, quien ayer declaró que el verdadero golpe de Estado lo realizó el propio Evo al intentar robarse la elección, que con su accionar estaba provocando una matanza en Bolivia.

«Deberían haber dicho que haya segunda vuelta y no recomendar nuevas elecciones», opinó.

Además, declaró que con la autoproclamación de la senadora Jeanine Arñez como presidenta de Bolivia se confirmaba el golpe de Estado en Bolivia y pidió a todos los partidos políticos dialogar para resolver la crisis en paz.

También sostuvo que la falla mecánica que sufrió el helicóptero que viajaba a principios de noviembre «no fue casual» y pidió que se investigase.