Los equipos periodísticos de TN, América 24, Crónica TV y Telefé fueron agredidos y acusados de realizar actos de sedición por parte del gobierno golpista de Jeanine Añez.
Fue la ministra de Comunicación transitoria, Roxana Lizarraga, la que tildó de «pseuperiodistas» a los equipos de comunicadores y confirmó que «están identificados y el ministro de Gobierno va a tomar las acciones pertinentes».
«Comenzaron mal», se limitó a decir el embajador argentino en Bolivia, Normando Álvarez García. Las organizaciones de prensa repudiaron el accionar del gobierno autoproclamado.
Álvarez García, en diálogo con A24 —cuyo corresponsal Rolando Graña es uno de los expulsados por el gobierno golpista—, confirmó esta tarde que los periodistas de TN, América 24 y Telefé ya habían sido recogidos por funcionarios de la embajada y se encontraban en su residencia, desde donde partirían hacia al aeropuerto para volver a Buenos Aires.
Por su parte, el canciller Jorge Faurie calificó de «totalmente infeliz» las declaraciones de Lizarriaga e indicó que se comunicará con quien ejerza el rol de canciller en el gobierno autoproclamado de Janine Añez para expresar la «viva disconformidad» del gobierno argentino.
El embajador, que el lunes negó el golpe de Estado en curso, evitó condenar la actitud del denominado «gobierno de transición» contra la libertad de prensa.
Ante la primera consulta, Álvarez García se excusó por no haber escuchado a Lizarraga y luego minimizó el hecho: «Voy a hablar con algún funcionario. Comenzaron mal, pero bueno…», respondió.
Poco antes, la Cancillería argentina había emitido un comunicado en el que aseguraba que «solicitó a las autoridades en ejercicio del poder en Bolivia velar por la seguridad e integridad física de los medios argentinos presentes en territorio boliviano», reconoció «las situaciones de violencia a las que fueron sometidos en estas últimas horas» y se comprometió a dar «seguimiento de la situación para asegurar la defensa de la libertad de prensa».
Las expulsiones por «sedición» fueron anticipadas más temprano por la ministra transitoria de Comunicación quien aseguró que para «aquellos periodistas o pseudoperiodistas que están haciendo sedición se va a actuar conforme a ley» e indicó que «ya se tiene identificados», a quienes poco después recibirían la orden de expulsión.
Martín García, periodista de Telefé y uno de los expulsados por el gobierno golpista, publicó en su cuenta de Twitter la supuesta foto por la que se lo acusó de sedición. Según señaló, se lo responsabilizó de hacer acostar a algunas manifestantes sobre la calle para simular una represión, cuando era exactamente lo que estaba ocurriendo.
Repudio de las organizaciones periodísticas
Al conocer la aplicación de la figura de sedición contra los trabajadores de prensa argentinos, el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA) repudió «los ataques a les trabajadores de prensa y a la libertad de expresión en Bolivia» e instó la Cancillería argentina a «garantizar la libertad de trabajo e integridad física de las y los colegas que cubren el golpe de Estado».
Por su parte, la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas manifestó su «preocupación» por los ataques recibidos por los equipos periodísticos y por los dichos de Lizarriaga, sin hacer mención a que lo ocurre se da en el marco de un golpe de Estado.