Francisco Bustillo habría gestionado la entrega de un pasaporte uruguayo para el narco Sebastián Marset mientras estaba detenido en Dubai. El narco está prófugo desde 2021. «Es la punta del iceberg», dicen desde la oposición.
El gobierno de Luis Lacalle Pou está envuelto en un nuevo escándalo político. La ex vicecanciller, Carolina Ache, reveló ante la justicia uruguaya audios que confirman que el Canciller, Francisco Bustillo, protegió al narcotraficamente Sebastián Marset, quien aparentemente habría recibido pasaporte uruguayo gracias a la gestión del gobierno. Ante eso, Bustillo no tuvo mas remedio que presentar la renuncia.
En el audio, el ministro le sugiere que «pierda» el celular para evitar darle a la Justicia conversaciones vinculadas a la entrega del pasaporte a Marset.
Ache, la funcionaria denunciante, planteó en rueda de prensa: «Yo fui la única política de este gobierno que renunció y se fue para su casa. No fue ni por haber hecho algo incorrecto ni por haber hecho algo ilegal, sino por no haber estado dispuesta a ocultarle comunicaciones a la Justicia y por haberme negado a cometer un delito».
«No tuve ninguna participación, ninguna injerencia en el trámite del pasaporte de Sebastián Marset. No estaba dentro de mis competencias y nunca actué por fuera de mis competencias».
No tuve ninguna participación, ninguna injerencia en el trámite del pasaporte de Sebastián Marset. No estaba dentro de mis competencias y nunca actué por fuera de mis competencias
Luego de presentar su renuncia, el Canciller dijo a través de un comunicado: «Deseo manifestar que no hubo nada ilegal en la tramitación del pasaporte tramitado para el señor Marset, en cuya instancia tampoco tuve participación ni conocimiento alguno. Por supuesto, tampoco mentí o me aparté de la verdad en la interpelación parlamentaria».
«La Dra. Ache descontextualizó conversaciones y obró de mala fe. Las cosas no son como se las ha mostrado, pero resultan suficientemente sensibles como para haberle presentado la inmediata renuncia al Señor Presidente», se defendió y confirmó que se presentará este viernes ante los tribunales uruguayos.
En 2021, Sebastián Marset obtuvo el pasaporte uruguayo mientras se encontraba preso en los Emiratos Árabes Unidos (EAU) en una gestión de la ue habrían participado tanto Cancillería como el ministerio del Interior, cuyo titular Luis Alberto Heber también en la cuerda floja. Em ambos casos, lo que se investiga es la falta de controles para entregar un pasaporte a una persona detenida por delitos graves.
Sebastián Marset es uruguayo y líder de la organización Primer Cartel Uruguayo (PCU) con vínculos con diferentes grupos narcos de la región como el brasileño Primeiro Comando Capital. Marset acumula diez años de antecedentes de tráfico de drogas y está prófugo desde el 2021. Lo buscan la DEA e Interpol por un caso de trafico de 16 toneladas de cocaína entre Paraguay y Europa a través del puerto de Montevideo, la nueva ruta narco revelada .
Sebastián Marset es uruguayo y líder de la organización Primer Cartel Uruguayo (PCU) con vínculos con diferentes grupos narcos de la región como el brasileño Primeiro Comando Capital. Marset acumula diez años de antecedentes de tráfico de drogas y está prófugo desde el 2021
El capo narco uruguayo habría vivido desde 2020 en Asunción y está investigado por sus vínculos con la empresa Tapyracuái, presuntamente relacionada con el operativo A Ultranza Py, una megainvestigación que sostiene que el uruguayo era el líder de un esquema transcontinental de tráfico de narcóticos y lavado de dinero con nexos con miembros de la familia Insfrán, un clan paraguayo con fuertes lazos con la política y la Iglesia católica. También se lo apunta por ser el cerebro del asesinato del fiscal paraguayo Marcelo Pecci en Colombia, en 2022 mientras estaba de luna de miel.
La última vez que se lo vio fue el año pasado en Bolivia y en los allanamientos que se hicieron en Santa Cruz se incautaron 17 fusiles, una pistola, 1.915 municiones, 28 cargadores para diversos tipos de armas, cuatro chalecos antibalas, una motocicleta, 31 vehículos (varios de alta gama), cuatro cuatriciclos, un vehículo recreativo deportivo Terix.
En septiembre del año pasado, las bandas narcos están instaladas en Montevideo y algunas zonas del interior del país. «Hay barrios donde mandan ellos (los narcos), el Estado está ausente y la policía no llega. Lo que se genera es una guerra por los territorios. No es nuevo esto, el año pasado apareció un contenedor lleno de cocaína en Alemania«, detalló una fuente que sigue de cerca la problemática.
Una de las fallas de la política de seguridad de Lacalle Pou se observa en que el 50 por ciento del espacio aéreo uruguayo están sin radar. «Puede pasar cualquiera en un avioneta y nadie sabe que lleva. Solo tiene radares en el aeropuerto internacional de Carrasco en el sur, pero nadie sabe que pasa para el norte, sobre todo el narcotráfico con Argentina y Paraguay en el río Uruguay, todo el mundo lo sabe», aseguran.
En este marco, a un año de terminar su mandato en Uruguay, Lacalle Pou suma otro escándalo de magnitud como el del su ex jefe de seguridad de Luis Lacalle Pou, Alejandro Astesiano, condenado por distribuir pasaportes falsos y acusado de formar parte de una red de espionaje ilegal bajo las órdenes del presidente.
El gobierno urguayo nombró como funcionario de la embajada de Uruguay en Buenos Aires a un hombre que cuenta con un procesamiento por contrabando desde 2002.
Se trata de José Reyes, quien además es titular de una empresa de importación radicada en Argentina.
En el gobierno creen que con la renuncia de Bustillo se acaba el escándalo pero Lacalle Pou, que se encuentra en Estados Unidos para reunirse con Joe Biden, está recibiendo presiones de su partido y de la coalición para que se produzcan más salidas e incluso sugieren que se denuncie penalmente al ex canciller. La lectura tiene cálculo político electoral, ya que, la oposición podría capitalizar la crisis y estar la ventaja en las encuestas de cara a las presidenciales de octubre del año que viene.
Fuentes de la oposición van más allá, dicen que esto «es solo la punta del iceberg» y sugieren que podrían impulsarse un juicio político contra Lacalle Pou. «Si se sigue investigando. Es claro que el Presidente está involucrado. Marset era uno de los que además de traficar Coca por la Hidrovía y estaba en el esquema de lavado de dinero para el clan Cartes. Y esta gente lo estaba protegiendo. Es gravísimo», remató.