Tras dos semanas sin registrar ataques, la capital de Ucrania fue blanco este jueves de bombardeos rusos durante la visita del secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, Antonio Guterres.
Rusia bombardeó Kiev para «humillar a la ONU», expresó el presidente ucraniano, Volodimir Zelensky.
Guterres y su comitiva dijeron que quedaron «conmocionados» por la proximidad de los bombardeos del Kremlin durante la visita, aunque todos están «a salvo».
«Es una zona de guerra, pero causa conmoción que esto haya ocurrido cerca del lugar en que nos encontrábamos», señaló el portavoz de la ONU, Saviano Abreu, sin precisar a qué distancia estaban de los lugares de impacto de los misiles rusos.https://rudo.video/vod/bNKlno
«El enemigo disparó contra Kiev. Dos ataques sobre el distrito de Chevshenkovsky», confirmó el alcalde de la ciudad, Vitali Klitschko. Por otro lado, agregó que «las informaciones sobre las víctimas están siendo esclarecidas». En tanto, el ministro ucraniano de Relaciones Exteriores, Dmytro Kuleba, denunció «un acto de barbarie» e indicó que los bombardeos se realizaron con misiles de crucero.
Heridos tras el ataque sobre Kiev
Según informó la agencia AFP, los bombardeos en la capital ucraniana, los primeros desde mediados de abril, dejaron al menos tres heridos. Zelensky denunció que «cinco misiles» cayeron en la ciudad «inmediatamente después de la reunión» que mantuvo con Guterres.
«Esto requiere una reacción potente, de la misma intensidad», agregó, al mismo tiempo que aseguró: «Los ataques dicen mucho sobre los esfuerzos de los dirigentes rusos para humillar a la ONU y a todo cuanto esta organización representa»,
«Necesitamos una victoria rápida sobre Rusia»
Poco después de que se conociera la noticia de la agresión de Moscú, Mijailo Podoliak, consejero de Zelensky, se manifestó mediante su cuenta de Twitter. «Ayer, Guterres estaba sentado en una gran mesa en el Kremlin y hoy hay explosiones encima de su cabeza«, ironizó haciendo referencia al encuentro que mantuvo el secretario general de la organización internacional con el presidente ruso, Vladimir Putin.
«Es la prueba de que necesitamos una victoria rápida sobre Rusia y de que todo el mundo civilizado debe unirse alrededor de Ucrania. Tenemos que actuar de manera rápida. Más armas, más esfuerzos humanitarios, más ayuda», pidió el jefe de la administración presidencial, Andrii Iermak.
En tanto, el funcionario ucraniano pidió privar a Rusia de su derecho de veto en el Consejo de Seguridad de la ONU. El secretario general de la ONU llegó este jueves a Ucrania, donde tiene previsto visitar Bucha e Irpin, en las afueras de Kiev. En la reunión, lamentó que el Consejo de seguridad fracasó en poner fin a la guerra, que inició el 24 de febrero con la invasión rusa.
Investigación de crímenes de guerra
La Fiscalía General de Ucrania confirmó la apertura de una investigación contra diez soldados rusos por su presunta implicación en las matanzas en Bucha.
El 2 de abril, la prensa informó acerca de una calle repleta de cadáveres en ese distrito y la ONU documentó el hecho, incluidas «algunas muertes por ejecución sumaria», de 50 civiles.
Moscú desmintió toda responsabilidad y habló de una «puesta en escena» por parte de las autoridades ucranianas. Por su parte, la Justicia ucraniana dijo que constituyó «8.600 expedientes específicamente de crímenes de guerra y más de 4.000 vinculados al mismo tipo de delito«.
Los hechos que actualmente son materia de análisis incluyen «asesinatos de civiles, bombardeos de infraestructuras civiles, torturas», así como «crímenes sexuales» denunciados «en el territorio ocupado de Ucrania», detalló la fiscal general, Iryna Venediktova. En otra medida, también se investiga «el uso de armas prohibidas», agregó.
