Mañana, el gobernador publicará el decreto que establece el protocolo de actuación para los tres poderes del Estado. Se confirmó el quinto caso en la provincia, de contacto estrecho con dos de los casos confirmados previamente. Psicólogos sociales integrarán las brigadas de acción en territorio, para prevenir el pánico social.

El gobernador Jorge Capitanich se reunió en la noche de este sábado con un grupo de psicólogos sociales en Casa de Gobierno. Los profesionales, trabajarán en el acompañamiento de casos sospechosos de coronavirus en territorio.

Además, el mandatario anunció que publicará este domingo el decreto que establece el protocolo unificado de acción para los tres poderes del Estado, y que se reunirá con intendentes para unificar criterios. Además, anunció la confirmación del quinto caso en la provincia.

“La pandemia nos pone en un lugar de aprendizaje político y social”, destacó el mandatario ante los profesionales, que trabajarán en brigadas junto a las fuerzas de seguridad, de salud y a un acompañante de la justicia. El trabajo con los psicólogos sociales tiene como fin tener herramientas para evitar el pánico y la alarma social.

Además, desde el ministerio de Salud Pública se confirmó el quinto caso, dado por contacto estrecho. Se trata de un menor de cuatro años, hijo de una de las personas que dio positivo por coronavirus y que no concurrió a la escuela.

Otro de los niños, de cinco años de edad, dio negativo a los estudios. Fue su caso el que motivó el cierre de los cursos de la escuela 73. Al confirmarse el negativo, se decidió levantar el aislamiento y que las clases continúen normalmente.

“Se produce una tendencia a una psicosis generalizada extrema con propensión al caos y la anarquía y en estas situaciones lo que menos hay que hacer es promover el caos y la anarquía”, aseguró Capitanich, quien remarcó la necesidad de “lograr un orden y una intervención de base territorial con el objeto de evitar la propagación de decisiones individuales y no colectivas”.

En cuanto a la suspensión de clases, el mandatario aseguró que existe “una clara presión social por parte de padres pidiendo la suspensión de clases. Ellos presionan a los sindicatos que promueven decisiones unilaterales.

Me preocupa enormemente la paralización de todo tipo de actividades y las consecuencias que eso tiene en el comportamiento social”, aseguró.

Y remarcó que “tomamos la decisión de no suspender las clases porque no existe una circulación viral probada. Si existe circulación viral probada se deben suspender las clases”.

“Es importante tener recomendaciones desde el punto de vista de la comunicación y de la acción para lograr una regulación adecuada del sistema de participación y de involucramiento social, para que la toma de decisiones nos garantice efectos”, resaltó el gobernador a la vez que explicó que se implementará un programa dividido entre la contención y la mitigación. Además, habrá un sistema de inspección para el personal que atiende a personas bajo resguardo para evitar la circulación viral.

“Necesitamos que no exista circulación viral y para esto el aislamiento es clave”, aseguró el primer mandatario provincial. En un trabajo conjunto, el Ministerio del Interior de la Nación está proveyendo la información de todas las personas de la provincia que realizaron viajes al exterior con el objeto de establecer una verificación cruzada de quienes están en efectivo aislamiento y quienes no, considerando que “tiene que haber un principio de solidaridad de la población respecto de la protección para evitar la circulación”, aseveró el gobernador.

Durante la jornada, el gobernador aseguró que los tres poderes del estado unificaron criterios y mañana se pretende hacer lo mismo con los municipios, “logrando así la coordinación nacional, provincial y municipal, para que sean únicos y equivalentes. Entendemos que cada decisión tiene sus efectos, y me preocupa enormemente la paralización total de todo tipo de actividad y sus consecuencias en el comportamiento social”, dijo.

Debido a que no existe una circulación viral probada, continúa la decisión de no cerrar las escuelas. Capitanich citó los casos de Jujuy y Misiones y aseguró que “las decisiones unilaterales provocan una psicosis extrema con propensión al caos.

Cuando existen problemas de estas características, hay que intentar lograr un orden y una estrategia de intervención de base territorial”, explicó.