Ante los rumores de la eliminación de los aportes públicos al sector del transporte informados desde el gobierno de Mauricio Macri, los propietarios de las empresas recurrieron a esta estrategia inusual que denota un espíritu amenazante.
La advertencia pudo leerse en varios colectivos que circularon este miércoles en Resistencia.
La intención del Gobierno Nacional de eliminar el subsidio al transporte público, preocupa tanto a empresarios de las líneas de colectivos como a los usuarios de los mismos. Los ploteos en los vehículos con la leyenda: «Sin subsidios, pasaje a 40. No a la quita de subsidios», encendieron varias luces de alarma.
De concretarse esta medida podría cuadruplicarse el precio del boleto y tendrá un impacto real y directo en el bolsillo de miles de chaqueños que a diario utilizan el transporte público.
Actualmente, la situación del sector atraviesa un momento conflictivo en la provincia. Desde la semana pasada la UTA inició un paro nocturno (de 22 a 6 de la mañana) que dura hasta hoy.
«Del otro lado del charco», los correntinos también se encontraron con estos mensajes, aunque además se podía leer otro que rezaba: “En Buenos Aires $13, acá a $40”.
Ambas leyendas se completaban con un “No a la eliminación de subsidios”, según publicó El Litoral.
En declaraciones a radio Con Vos semanas atrás, el vicegobernador Daniel Capitanich dijo: “Nosotros no vamos a apoyar ningún tipo de ajuste que tenga que ver con las provincias. No vamos a avalar la transferencia de los subsidios de transporte”, luego de participar de la reunión que mantuvieron en el Consejo Federal de Inversiones (CFI) varios gobernadores, senadores, diputados y miembros de la CGT.
A su vez, Capitanich explicó que los subsidios son $ 700 millones anuales para Chaco. “Es un número extraordinario y no lo vamos a poder asumir. Si lo transferimos a tarifas, se iría a más de $ 35”, alertó, luego de señalar algo de lo que también se quejaron en otras provincias: “La situación amerita que los gobernadores no se enteren por los medios”.
De los $ 100.000 millones que, según la Nación, las provincias deben aportar al ajuste, $ 43.000 serían de subsidios al transporte, $ 14.500 de la tarifa social y $ 26.000 del fondo de la soja.
Los $ 15.000 restantes son la novedad en la discusión porque se cubrirían con nuevos ingresos por retenciones y aumento de impuestos, según un informó el Cronista.
