Un oficial de la policía bonaerense fue asesinado este lunes de nueve balazos al enfrentarse con delincuentes que escapaban después de cometer tres asaltos y tirotearse con otros efectivos que los perseguían en el partido de La Matanza. Hay tres sospechosos detenidos por el crimen.

Los ladrones se toparon con Emiliano Roberto Ojeda cerca del cruce de las calles Donovan y Montenegro, junto al sector nuevo del predio del Cementerio de La Tablada. Para ese momento ya habían robado un frigorífico, una fábrica de plásticos, una mueblería y hasta intentaron llevarse un taxi de un lavadero en el que planeaban seguir la fuga. También habían perdido a uno de sus secuaces, que fue detenido mientras huía con dinero, celulares y los fiambres robados.

Los otros tres se cruzaron con Ojeda, que estaba de civil y a bordo de su auto Peugeot 308 azul. La principal hipótesis, indicaron fuentes cercanas a la causa a la agencia Télam, es que la víctima no pudo defenderse porque se le trabó su arma. Los delincuentes no desperdiciaron esa oportunidad: lo acribillaron y se llevaron su vehículo.

Ojeda fue encontrado poco después por un compañero, junto a su pistola Bersa Thunder Pro. 9 milímetros con la corredera trabada. Lo trasladaron al Hospital Ballestrini de Ciudad Evita pero llegó muerto. Tenía nueve balazos, la mayoría en la zona toráxica.

La policía detuvo más tarde a otros dos sospechosos. Uno de ellos tiene antecedentes por robo agravado y evasión, mientras que el otro, que se había escondido en un baño de mujeres, tenía en su poder cinco teléfonos. El cuarto cómplice de la banda, por el momento, sigue prófugo.

Los tres detenidos quedaron a disposición del fiscal Claudio Fornaro, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) de Homicidios del Departamento Judicial La Matanza.