El oficialismo busca impulsar el tratamiento del proyecto de interrupción voluntaria del embarazo, cuyo debate se iniciaría mañana en la Cámara de Diputados.

Para ello, primero es necesario que la iniciativa obtenga este miércoles 9 de diciembre un dictamen favorable en comisión. El plenario de comisiones de Legislación General, Penal, Salud y Mujeres está previsto para las 16:30 horas. Se estima que se va a lograr el dictamen favorable porque las comisiones están integradas por una mayoría de legisladores “verdes” que defiende la norma.

Desde el oficialismo, aseguran que tienen el quórum para que se trate mañana la iniciativa dado que antes se va a debatir el proyecto de los 1.000 días, de atención y cuidado de la salud durante el embarazo y la primera infancia.

También sostienen que cuentan con los números para lograr la media sanción. 

Según adelantó la diputada Cecilia Moreau ayer martes 8 de diciembre, durante el plenario el oficialismo podría avanzar «en algunos cambios a la iniciativa» del Poder Ejecutivo.

Estas modificaciones buscan asegurar la sanción del proyecto, que fue impulsado por el presidente Alberto Fernández.  En 2018, la iniciativa logró la media sanción en Diputados con 129 votos afirmativos y 125 negativos en una histórica y maratónica sesión, pero perdió en el Senado por 38 en contra y 31 a favor. Desde mediados de noviembre comenzó la pugna por los sufragios por parte del Frente de Todos para asegurar que esta vez el proyecto sí se convierta en ley.

La aprobación de la despenalización del aborto podría ser leído como un triunfo político de Alberto Fernández en un momento en el que el mandatario se encuentra debilitado por los efectos de la pandemia de coronavirus, a nivel económico y social, y las críticas a su gestión del velatorio de Diego Armando Maradona.

Las modificaciones que se plantean El proyecto que analizarán los diputados establece que «las mujeres y otras personas con identidades de género con capacidad de gestar» tienen derecho a practicarse un aborto hasta la semana 14 del proceso gestacional.

Además, habilita la «objeción de conciencia» por parte de profesionales de la salud que no quieran llevar a cabo la práctica, aunque no sería admitida a nivel institucional. Uno de los cambios que se analizan precisamente es incorporar al texto la “objeción de conciencia institucional”, para que los centros privados puedan negarse a practicar abortos sin ser sancionados, según adelantó Clarín.

La alternativa en ese caso podría ser realizar acuerdos de derivación con otros sanatorios abonando el costo de la intervención. 

El artículo 8 es otro de los que genera ruido, al indicar que las adolescentes de entre 13 y 16 años “cuentan con aptitud y madurez suficiente para decidir la práctica y prestar el debido consentimiento, a menos que deba utilizarse un procedimiento que implique un riesgo grave para la salud o vida”.

Podría incluirse que deban estar acompañadas por un “referente afectivo” para la práctica.  Finalmente, otra posibilidad es ampliar de 5 a 10 días el plazo para la realización de un aborto desde que se solicita.

La prioridad para el oficialismo es que la iniciativa se sancione sin cambios en Diputados por lo que las modificaciones, si las hubiera, se van a conocer esta tarde en el debate en comisión.