La Corte Suprema de Justicia de la Nación decidió este jueves 29 de octubre avanzar sobre la grave situación planteada en la provincia de Formosa, que para «blindarse» ante la pandemia de coronavirus impide la entrada de numerosos ciudadanos desde hace meses, emplazando al gobernador Gildo Insfrán para que su administración informe en el plazo de tres días sobre esa grave cuestión.
«Se solicitó información respecto de las medidas adoptadas por las autoridades provinciales en lo que concierne a las personas que se encontrarían varadas en las cercanías de los límites provinciales a la espera de poder ingresar al territorio formoseño (causa CSJ 592/2020); al tiempo que inquirió respecto de la cantidad de pedidos de ingreso de personas al territorio provincial, admisiones y rechazos, criterios aplicados para resolverlos y orden de prelación asignado a las peticiones, con precisión respecto de las fechas en que dichas solicitudes fueron efectuadas y, en su caso, si fueron acogidas con habilitación inmediata de ingreso al momento de la autorización o a fechas diferidas (causa FRE 2774/2020)», señaló el informe del Tribunal sobre el acuerdo de este jueves.
La causa sobre el «blindaje formoseño» la iniciaron el senador formoseño Luis Petcoff Naidenoff y el abogado Carlos Lee, presentando sendos habeas cospus contra el Consejo de Atención Integral de la Emergencia Covid-19 de la gestión Insfran, que es el que mantiene vigente la restricción de ingreso a esa provincia, incluso a ciudadanos con residencia en ese mismo distrito, que por diversas circunstancias se encontraban fuera de sus límites en el momento en que se dispuso el cierre, y quedaron absolutamente desamparados y sin recursos, a la vera de las rutas y controles policiales.
La Corte le dio tres días a Formosa para conocer más detalles de la situación, aunque aclaró que el pedido de esos informes se hacía «sin perjuicio de lo que en definitiva decida respecto de su competencia originaria».
Los problemas de ingreso a Formosa determinaron situaciones desesperadas, como la muerte de Mauro Ledesma, un joven de 23 años que murió ahogado al intentar cruzar el río Bermejo y así cruzar el límite provincial entre Chaco y Formosa. Ledesma quería ver a su esposa y su hijo pequeño, de los que estaba alejado desde enero.
Sobre ese episodio, el Gobierno formoseño lo consideró «un hecho doloroso», pero argumentó que los números sanitarios de la provincia son los mejores del país: «No tenemos muertos por coronavirus y no tuvimos que usar ni un solo respirador».