La Pampa, una de las provincias que venía prácticamente sin casos, sumó este sábado 25 nuevos contagios de coronavirus por un brote en la ciudad de Catriló y el gobernador Ziliotti suspendió encuentros familiares y la apertura de restaurantes. De esta manera, La Pampa en apenas un día triplicó sus casos totales, desde el inicio de la pandemia.
La Pampa venía sorteando la pandemia casi sin casos y apenas había registrado ocho positivos y sólo uno de ellos era activo. Con los 25 de este sábado el total se eleva a 33 y las autoridades prevén ahora que el número siga aumentando, ya que registraron más de 40 personas que presentaban síntomas compatibles con el Covid-19.
El otro foco imprevisto que se confirmó este sábado fue en Tucumán, otra de las provincias que venía atravesando la pandemia hace semanas casi sin casos, lo que llevó al gobernador Manzur a liberar casi todas las actividades, incluida la gastronomía, y permitir las reuniones familiares y sociales. En este caso, el brote se produjo en la ciudad Ingeniero Lastenia, en las afueras de la capital San Miguel.
El gobierno detectó en la noche del viernes ocho contagios y si bien aseguran conocer el origen del nuevo brote, la idea de la circulación comunitaria genera cada vez mayor preocupación. La provincia suma así 111 positivos desde el inicio de la pandemia.
El foco de contagios se disparó a partir del caso 97. Según se informó, se hisoparon a diez familiares directos del paciente mencionado, de los cuales ocho arrojaron resultado positivo. A su vez, se realizaron pruebas de rigor a otros 30 contactos laborales, los cuales dieron negativo, y se encuentran en aislamiento de manera preventiva.
Ante este escenario, el gobierno de Luis Manzur dispuso el inicio de un bloqueo total en la zona y aisló a 250 familias, repitiendo la estrategia de aislamiento por zonas que aplicó en el país Córdoba, en base al modelo chino. La ministra de Salud, Rossana Chahla, explicó que «las personas que quedaron dentro de ese anillo no podrán salir de sus casas y que los comercios de la zona van a permanecer cerrados».
El bloqueo epidemiológico es por 15 días y el municipio de Banda del Río Salí será responsable por la asistencia a esas familias con las necesidades básicas. Fuera del perímetro la situación es normal.
Las personas que quedaron dentro de ese anillo no podrán salir de sus casas y que los comercios de la zona van a permanecer cerrados.
Aunque comparado con la situación del AMBA el foco tucumano parece chico, en rigor representa una fuerte preocupación que haya surgido en el Gran San Miguel de Tucumán, uno de los conglomerados urbanos más importantes del país, que supera incluso al Gran La Plata.
Se produce además en una provincia que avanza con cada vez más aperturas. Esrta semana el Comité Operativo de Emergencia dispuso que los bares puedan funcionar desde las 7 hasta la 1 de la madrugada.
La flexibilización en Tucumán también alcanzó al turismo interno y la apertura de los hoteles alojamientos. Hasta hace pocas horas, los medios de la provincia que gobierna Manzur consideraban al conurbano de San Miguel de Tucumán como la contracara del AMBA.
Pero la idea de circulación comunitaria dentro de la provincia comenzó a sonar fuerte en los últimos días, en especial luego de que seis trabajadores de la salud que prestaban servicio en un centro de aislamiento de Yerba Buena se contagiaran de Covid.
Manzur dispuso en Tucumán medidas extremas para evitar que se expanda el virus. La Legislatura aprobó semanas atrás una polémica ley que dispone el cierre de los límites provinciales por 60 días para evitar los casos importados de coronavirus, una medida considerada «terriblemente inconstitucional».
Eso llevó a que en las fronteras se vivan situación complejas. El viernes, en Los Mistoles -uno de los límites de Tucumán y Santiago del Estero- un grupo de camiones que llevaban casi veinte horas esperando el turno para el control sanitario decidieron pasar por la fuerza el control.
Los 17 conductores fueron aprehendidos en el siguiente puesto, sus vehículos quedaron secuestrados por 60 días y deberán cumplir ahora una cuarentena por 14 días. Los camioneros relataron que había un solo médico haciendo test a una fila de camiones de 10 kilómetros.