El Gobierno negocia para oficializar esta misma semana el incremento para empleados estatales, el cual se va a percibir en los salarios de febrero y marzo.

El Gobierno trabaja para hacer extensivo el aumento salarial de 4000 pesos que concedió por decreto a los empleados del sector privado el pasado viernes 3 de enero a los trabajadores de la administración pública nacional.

En un principio se había anunciado que la suba sería inferior, pero desde los gremios estatales reclamaron que el monto fuera el mismo.  «Perdimos entre un 35 y un 42% de masa salarial en los últimos 4 años. Todas las paritarias fueron a la baja», lamentó el secretario general de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) Capital, Daniel Catalano, cuando se oficializó la suba salarial a los privados y desde el sector gremial estatal reclamaron que se hiciera extensivo a su área en cifras iguales.

De este modo, la Casa Rosada negocia para que se pueda oficializar el aumento a los empleados estatales esta misma semana, después de que el viernes pasado ya concediera la suba a los del sector privado. 

Según informó El Cronista, el incremento en el salario finalmente será el mismo que para los trabajadores privados: 4000 pesos y también se cobrará en dos cuotas.

No obstante, los estatales lo van a percibir de una forma diferente: los primeros $ 3000 se abonarán con los sueldos de febrero y los otros $ 1000 se pagarán con los salarios de marzo. Este incremento no será general, tal y como habían anticipado desde los sindicatos estatales.

Los aumentos los van a percibir los trabajadores de la planta de la administración nacional que perciban salarios por debajo de los $ 60.000.

Esta condición también regirá para el personal de organismos descentralizados del Estado. Tal y como indicó ATE a través de un comunicado, el aumento se dará por medio de “un decreto del Poder Ejecutivo, y “no formará parte de una negociación entre las partes”.

En ese mismo escrito la central sindical de los estatales precisó que “al igual que el del sector privado, el incremento será deducible de la paritaria 2020”, es decir, que no afectará a los aumentos (5% enero y 5% en febrero) previstos en la paritaria de 2019. No obstante, en este último punto aún no se llegó a un acuerdo.

El Gobierno tiene que pactar si la suba podrá considerarse a cuenta de la negociación salarial de 2020 o también como parte de las paritarias 2019.

Los gremios son contrarios a esta última opción, pues consideran que la del año pasado ya está cerrada.