El gobierno de Javier Milei echó esta tarde a la Canciller, Diana Mondino, tras la votación de la Argentina en contra del embargo de Cuba hoy en la Asamblea de Naciones Unidos, según se pudo confirmar Mondino será reemplazada por el actual embajador Gerardo Werthein.
La votación de la Argentina fue llamativa porque rompió la retórica del Gobierno en contra de la isla caribeña y no se alineó a Estados Unidos ni a Israel. El Gobierno acumulaba críticas a Mondino y fuentes de Rosada sostuvieron a este medio que la votación a favor de Cuba fue la gota que rebalsó el vaso.
Hoy se llevó adelante la trigésima segunda votación contra el embargo económico en Cuba y la región tuvo una posición unánime a favor de la isla con la votación de 187 países, la abstención de Moldavia y dos históricas expresiones en contra: Estados Unidos e Israel.
La misma votación se hace desde 1992, en aquella primera votación solo apoyaron a la isla 59 países. Este 2024 el resultado, sin dudas, fue contundente contra el bloqueo que, desde 1962, Estados Unidos impone a Cuba por considerar que esa medida viola la Carta de las Naciones Unidas. Desde entonces, se fue endureciendo y, a partir de la década de 1992, comenzó a alcanzar a terceros países. Luego de la votación, fuentes de la Cancillería ensayaron una explicación sobre el sentido del voto y afirmaron: «Nuestra posición histórica es en contra de las medidas coercitivas unilaterales consideradas ilegales si no provienen del Consejo de Seguridad». Y agregaron: «Es un voto a favor del libre comercio”.
En un comunicado, la Oficiana del Presidente de la República Argentina no dejó dudas respecto a lo que motivó la salida de Mondino: «Nuestro país se opone categóricamente a la dictadura cubana y se mantendrá firme en la promoción de una política exterior que condene a todos lso regímenes que perpetúan la violación de lso derechos humanos y las libertadores individuales».
En el documento, Casa Rosada explica que Mondino presentó la denuncia y que ahora Werthein será «quien liderará la continuidad de la transformación en la política exterior».
«La Argentina atraviesa un período de cambios profundos y esta nueva etapa exige que nuestro cuerpo diplomático refleje en cada decisión los valores de libertad, soberanía y derechos individuales que caracterizan a las democracias occidenteles», continuó. Aclaró que llevará además adelante una «auditoría del personal de carrera de la Cancillería, con el objetivo de identificiar impulsores de agendas enemoigas de la libertad».
Los traspiés de Mondino
Los ruidos entre Rosada y el Palacio de San Martín venían desde hace mucho rato. La ahora ex canciller estuvo en la cuerda floja en más de una oportunidad. En junio, Milei analizó echarla después de que el encargado de negocios de Palestina estuviera presente en el marco de un encuentro que se iba a realizar en la Mezquita de Palermo y Milei no estuviera al tanto de ello. El Presidente se enteró de la presencia del palestino una vez que había salido de Rosada. De inmediato frenó la marcha y volvió para Balcarse 50.
Como con Cuba, Milei tiene una postura tomada frente al Estado Palestino. Para dar un ejemplo, en la Asamblea General de Emergencia de la ONU, Argentina votó en contra de incluir a Palestina como miembro pleno, como venía sosteniendo nuestro país históricamente. Sin embargo, Mondino también lideró un movimiento «rebelde» en la ONU cuando pidió un alto fuego en la Franja de Gaza.
Otro de los «papelones» de la ex canciller fue cuando por un tuit puso en riesgo la vida de los seis asilados políticos que estaban en la embajada argentina en Venezuela, durante los días más críticos después de la elección impugnada por la oposición. Mondino había escrito en X que reconocía a Edmundo González como Presidente, Milei lo retuitió y eso hizo crujir las relaciones entre países y los pasillos de Cancillería porque no era la posición oficial del Gobierno. Al punto que minutos después la Cancillería sacó un comunicado, tras la intervención del asesor presidencial Santiago Caputo, y en la que desconoció el resultado que dio ganador a Nicolás Maduro pero no reconoció a González como máxima autoridad de ese país.
El mensaje amenazante contra la diplomacia argentina
Hace diez días, Milei envió una comunicación oficial al cuerpo diplomático en la que amenazó a las y los embajadores y altos funcionarios del Servicio Exterior para que se alineen con las posiciones que expresó el propio Presidente en la Organización de Naciones Unidas (ONU) y en contra de la Agenda 2030.