La directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde, sigue en Buenos Aires para controlar de cerca el avance del plan de ajuste que le impuso al gobierno nacional a cambio del crédito stand by que otorgó el organismo por 50 mil millones de dólares.

Este sábado por la mañana, y en el marco de la cumbre de ministros de finanzas y presidentes de bancos centrales del G20 que se realiza en la Ciudad, la funcionaria ofreció una conferencia de prensa junto al ministro de Hacienda y Finanzas, Nicolás Dujovne, con quien redondeó la relación que avanza al compás de unajuste brutal que para el año próximo, entre otras metas, incluye reducir el gasto público del PBI en un 50 por ciento.

«Lo importante es cumplir con el programa», dijo sin titubear Dujovne cuando le tocó hablar junto a la invitada de honor del gobierno de Mauricio Macri.

Por su parte, Lagarde fue categórica: «Las metas de inflación deben ser alcanzadas», disparó y vaticinó un 2019 plagado de maravillas para nuestro país. «La economía argentina va a mejorar en el 2019», sostuvo y agregó que el organismo que comanda está «preparado para proveer cualquier tipo de ayuda necesaria para cumplir con las metas fiscales».

«La inflación había alcanzado un punto alto pero se tomaron las medidas necesarias y estamos encaminados», agregó en plural.

En cuanto al lugar que ocupa el cada día menos independiente Banco Central en este marco de un ministerio de Hacienda con doble comando Buenos Aires-Washington, Dujovne señaló que la entidad que administra Luis Caputo «cuenta con todo nuestro apoyo en lo que respecta a su política monetaria para cumplir con la meta de inflación».

La conferencia de prensa y la visita de Lagarde acontece mientras el Fondo Monetario prepara para agosto el desembarco en Buenos Aires con una delegación compuesta por personal técnico y administrativo que realizará un puntilloso monitoreo de las metas fiscales y económicas.

En tanto, en septiembre llegará una misión oficial para la primera prueba que le tomará al equipo de Cambiemos.