El director del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina, advirtió que “cuanto más dure la recesión, todo se agrava” y sostuvo que la gran parte de la clase media se encuentra “decepcionada”. De esta forma, su voto será determinante en las elecciones de 2019.
Si bien los índices que miden la pobreza en el país, están más bajos si se comparan el primer trimestre de este año con el del año pasado, lo cierto es que el panorama actual advierte que el incremento de la pobreza seguirá ascendente, afectando a las clases más bajas y también la caída de la clase media.
Según el director del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina (UCA), Agustín Salvia, la pobreza podría llegar a superar el 33% en 2018 y “cuanto más dure la recesión, con estos niveles inflacionarios, todo se agrava”.
“Los sectores medios, bajos pueden caer en la pobreza. No es un hecho explosivo. Y si hubiera despidos, sería peor aún. Si logran estabilizar la inflación y evitar despidos masivos, iremos sorteando lo peor por unos meses”, analizó Salvia para Perfil.com.
Este duro panorama se da principalmente por una inflación desatada, que a fin de año se estima llegará a superar el 42%.
Pero, hay otros factores, según el sociólogo “mucha gente busca compensar con más horas de trabajo”, algo que generalmente “no se produce”, incluso en las famosas “changas” que vienen a tapar la dolorosa ausencia de un empleo formal.
“La persona va a decir que es pobre, pero no deja de sentirse de clase media. Sigue teniendo esa aspiración. Pero no saca ya el auto, se toma el colectivo. No se irá de vacaciones. Quizás cambie su forma de alimentarse: más arroz y menos carne. Todo esto siempre y cuando no se quede sin trabajo”, sinceró con crudeza, el director del estudio social que realiza la UCA.
Frente a este panorama, sin embargo, Salvia consideró que la gente no está “enojada” sino “más bien decepcionada”, pero que ese sector de la clase media que alguna vez tuvo en manos el kirchnerismo y que en 2015 interpeló la campaña de Mauricio Macri, sigue siendo hoy una variante indescifrable para las elecciones de 2019.
“Uno puede pensar que son el 25%, el 30% de los electores. Es un grupo que se dividió en distintas fuerzas políticas, pero es el que incidió fuertemente para que Cristina tuviera el 54% en su momento. Y también hizo que Macri ganara las elecciones”, explicó Salvia y remarcó: “es un sector social que desbalancea las elecciones para un lado o para otro”.