La Cámara Federal confirmó el procesamiento de la ex presidenta en la causa por las fotocopias de los cuadernos del chofer Centeno. Los camaristas Bruglia y Bertucci marcaron una clara línea: los ex funcionarios quedaron acusados por integrar una «asociación ilícita», mientras a los empresarios señalados se les redujo la figura a la de «cohecho».
La Cámara de Apelaciones ratificó el procesamiento por presunta “asociación ilícita” de la senadora y ex presidenta Cristina Kirchner en la causa que investiga supuestos sobornos registrados en fotocopias de cuadernos nunca hallados y en la que están involucrados varios empresarios.
Sin embargo, el fallo firmado por los camaristas Leopoldo Bruglia y Pablo Bertucci cambió esa figura que también recaía sobre los empresarios imputados y la reemplazó por la de “cohecho”, lo cual hace que el delito sea excarcelable.
Entre los que quedaron dentro de la acusación por «asociación ilícita» están, además de CFK, el ex ministro de Planificación Julio De Vido y los ex funcionarios Roberto Baratta, Nelson Lazarte, Rafael Llorens, Hernán Gómez, José María Olazagasti, Ezequiel García, José López y Walter Fagyas.
Solo dos empresarios también fueron señalados bajo esa figura penal: Carlos Wagner , ex titular de la Cámara Argentina de la Construcción, y Gerardo Ferreyra, de Electroingeniería.
Mejor suerte tuvieron los empresarios que aparecieron en las fotocopias de los cuadernos de Oscar Centeno, ex chofer de Baratta, presuntamente haber pagado coimas. Se les dictó la falta de mérito como miembros de la «asociación ilícita» y fueron acusados por «cohecho».
Entre ellos está Ángelo Calcaterra, el primo del presidente Mauricio Macri y ex CEO de la empresa Iecsa. También quedaron bajo esa figura penal más benévola los empresarios Aldo Roggio, Gabriel Romero, Armando Loson, Hugo Antranik Eurnekian, Luis Betnaza y Juan Carlos de Goycoechea, entre otros.
Con la decisión de la Cámara, el juez federal Claudio Bonadio quedó en condiciones de insistir ante el Congreso de la Nación con el pedido de desafuero de la actual senadora nacional Cristina Kirchner, como anticipó que haría cuando la procesó.
En el fallo se validó la constitucionalidad de la figura del arrepentido en el caso, se confirmó a Bonadio en la investigación y se consideró como «prueba válida» a las ocho fotocopias de los cuadernos de Centeno, uno de los arrepentidos, cuyo procesamiento quedó ahora ratificado como miembro de la presunta asociación ilícita.
El Tribunal ordenó liberar a ocho detenidos: Hernán Gómez, Fabián García Rawson, Walter Fagyas, Hernán del Río, Raúl Vertúa, Carlos Mundin, Néstor Otero y Juan Carlos Lascurain, estos dos últimos con prisión domiciliaria hasta el momento.